Un tapcero estaba colocando una alfombra en una casa lujosa. Al terminar quiso fumar, pero no encontró la caja de cigarrillos. Pronto descubrió un pequeño bulto en la alfombra. Como ya había finalizado, decidió tomar un martillo y aplanar a golpes la caja para que no se notara. Poco después llegó el dueño de la casa y le dijo:
- Lo felicito caballero, ha hecho un buen trabajo. Aquí están sus cigarrillos; los encontré en el frente de la casa. Una cosa más: ¿Por casualidad no vio a mi hámster?