Jeff Gordon y su celebración, 67 carreras después de la anterior. El motor no volvió a encender...
Un año, 10 meses y 22 días tuvieron que pasar para que el cuádruple campeón de la Copa Sprint de NASCAR Jeff Gordon consiguiera por fin una victoria en una carrera puntuable de la máxima división. Él mismo admitió dudar si volvería a hacerlo, pero dice ahora sentirse con la seguridad de que aún tiene ese algo que lo llevó a conseguir 82 victorias antes de este domingo. Ahora es quinto junto al legendario Cale Yarborough en el ranking de victorias en la historia de la serie y está a una del tercer lugar.
En otras ocasiones en que estuvo cerca de la victoria, Gordon estuvo más defendiendo que atacando mientras que en esta ocasión puso bajo presión a un Kyle Busch que estuvo cerca de barrer en Phoenix este fin de semana. Necesitaba más que una escoba para poder hacerlo, pues Gordon demostró ser el mejor del día asumiendo el liderato apenas 10 vueltas después de haberse visto contra el muro en el incidente generado por el contacto entre Kyle Busch y Carl Edwards. Su sobrepaso a Kyle fue categórico a 8 vueltas del final y dejó sin opción al piloto de Gibbs.
Si bien la carrera fue poco fluida en un inicio, con ese gran accidente que involucró a 13 autos en la vuelta 67 poco después del de Edwards, la segunda mitad de la carrera resultó mucho menos accidentada. Juan Pablo Montoya logró evitar que su carrera terminara como la de su compañero de equipo siguiendo las indicaciones de su spotter Tab Boyd en el Big One, pero su auto sufrió daños sin embargo.
Si esto tuvo que ver con que no encontraran nunca el balance no lo sabemos aún, pero hasta ese momento Montoya batalló un auto con subviraje y por momentos una máquina poco obediente en la mitad de la curva. Está claro que hay trabajo por hacer para Pattie y su equipo en este tipo de pistas, pues este domingo realmente no hubo un solo destello de luz en el auto 42, que al final cruzó la meta en el puesto 19, una vuelta atrás después de haber rodado hasta con 3 de retraso en un momento de la carrera.
Difícil día también para el ganador de Daytona Trevor Bayne, quien cometió un error aparente que lo puso contra el muro por tercera vez durante el fin de semana. Las dos anteriores no habían sido culpa suya pero de esta última no se puede decir lo mismo, aunque tal vez comparta responsabilidad con su spotter.
Kyle Busch es ahora el líder del puntaje, seguido de su hermano Kurt, mientras que los de Hendrick tuvieron una tarde productiva en términos del puntaje, ya que terminaron todos entre los 13 primeros a pesar de haber tenido una mala clasificación. Los 4 autos del equipo campeón probaron novedades en lo técnico, de acuerdo a lo manifestado por Rick Hendrick después de la carrera y con el paso del fin de semana fueron encontrando cada vez más el norte en el balance.
La tabla general muestra que Montoya empata ahora en puntos con Bobby Labonte y Ryan Newman, pero en el desempate por mejores resultado en estas dos primeras carreras, pierde con ellos. Está a 16 unidades del nuevo puntero del campeonato.
La próxima competencia en Las Vegas nos dará más claridad sobre el trabajo que han hecho los equipos durante el invierno, pues será la primera pista intermedia de la temporada. Allí se verá como sortearon los ingenieros y jefes de equipo de cada organización el cambio de balance aerodinámico inducido por la nueva nariz que los autos de la Copa Sprint tienen este año.
Los horarios para la próxima semana serán los mismos de este domingo ya que se correrá de nuevo en la costa oeste de los Estados Unidos.