Bogotá, 14 feb (PL) El Gobierno colombiano desmintió hoy que haya autorizado la reanudación de algún operativo humanitario para la liberación de retenidos por la guerrilla, luego que se frustraran ayer dos entregas por información errónea.
En un breve comunicado la Casa de Nariño (sede del Ejecutivo) apuntó que está a la espera de reunirse con el Comité Internacional de la Cruz Roja para recibir toda la información de lo sucedido en la jornada de la víspera.
Sólo después de ese encuentro -refiere el texto- el Ejecutivo tomará una decisión con respecto a los operativos de liberación.
Previamente el representante para Colombia del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Christophe Beney, declaró que el Gobierno había aceptado continuar con el proceso de entrega de los uniformados Salin Antonio Sanmiguel y Guillermo Solórzano.
La operación de liberación comienza hoy porque me tengo que reunir con el ministro de Defensa, Rodrigo Rivera, para entregarle el área que debe desmilitarizarse en la zona rural del departamento de Cauca, informó Beney.
Sin embargo, esas afirmaciones fueron desmentidas por el Ejecutivo a través de un comunicado, ante lo cual Beney pidió excusas ante la opinión pública nacional e internacional por sus declaraciones.
El Gobierno colombiano sostuvo que la información errónea entregada por la Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) frustró la liberación unilateral de los dos uniformados referidos, contrario a lo previsto y acordado en los protocolos con la Cruz Roja Internacional.
De acuerdo con el interlocutor del Gobierno para el proceso de liberaciones, Eduardo Pizarro, las FARC dieron coordenadas equivocadas del lugar donde serían liberados los prisioneros.
Las FARC entregaron unas coordenadas en el departamento de Tolima, los helicópteros brasileños fueron a esas zonas y resulta que supuestamente los retenidos no se encuentran ahí sino en el departamento del Cauca, expresó.
A su vez, Pizarro aseguró a la opinión publica que el Gobierno colombiano cumplió estrictamente con todos los compromisos asumidos.
Cumplimos con los protocolos de seguridad firmados entre el Ministerio de Defensa y la Cruz Roja Internacional, no actuamos militarmente en las zonas donde se iban a producir las liberaciones y tampoco hubo sobrevuelos militares, explicó.
En tanto, la exsenadora Piedad Córdoba, quien lideró la misión humanitaria para traer de vuelta a los retenidos, se abstuvo ayer de hacer declaraciones a la prensa al respecto e indicó que el Gobierno daría las explicaciones sobre lo ocurrido.
Este domingo las liberaciones unilaterales de dos retenidos por las FARC fueron canceladas, al tiempo que se desconoce cuándo se producirán.
De los tres prisioneros que iban a ser entregados en sitios diferentes, solo regresó a la libertad el policía Carlos Alberto Ocampo, quien fue hecho prisionero en diciembre pasado y cuya liberación no estaba prevista en un inicio.
Con esa entrega llegó a cuatro el número de personas liberadas por las FARC en estos días.
El pasado miércoles fue entregado a la misma misión humanitaria el concejal Marcos Baquero y, el viernes, el concejal Armando Acuña y el infante de Marina Henry López.