La prensa haitiana acaba de anunciar que el dictamen de la OEA sobre la primera vuelta de las elecciones presidenciales haitianas del pasado 28 de noviembre confirma los temores de que efectivamente hubo fraude al tiempo de anunciar sus resultados.
El documento, que ya está en poder del Presidente de Haití, René Preval, se habría así filtrado a los medios locales. Fue producido por dos equipos del organismo regional, uno de expertos en verificación de resultados electorales y otro de carácter jurídico.
Para la OEA, el yerno del presidente, Jude Celestin, no habría llegado segundo, sino tercero; razón por la cual, la segunda vuelta debería enfrentar a la ex primera dama, Mirlande Manigat, contra el popular cantante Michel Martelly, cuyos partidarios fueron precisamente quienes salieron en su momento a las calles denunciando el fraude que ahora confirmaría el informe del organismo regional. Esta es, entonces, una derrota del nepotismo como mecanismo para intentar perpetuarse en el poder.
La segunda vuelta de las elecciones presidenciales estaba originalmente prevista para el próximo domingo 16 de enero, pero obviamente ya no podrá realizarse en esa fecha. Desde la OEA informan que se estima que, no obstante lo sucedido, la segunda vuelta podría realizarse en el transcurso del próximo mes de febrero.
Esto en la medida que, ante el informe de la OEA, no se reiteren las protestas masivas al comprobarse la existencia de fraude. Haití necesita de la paciencia de su electorado para poder completar una transferencia de poder que sea lo más ordenada y pacífica posible, porque de ella no sólo depende la democracia, sino también poder poner en ritmo el dilatado esfuerzo de reconstrucción del devastado país.
(*) El autor es ex Embajador de la República Argentina ante las Naciones Unida.
Tomado de Yahoo news.