Saludos Denunciantes, es la primera vez que me motivo a escribir una historia en este foro, pero hace un par de años viví una experiencia que aún me tiene pensando.

Estaba en el mes de Junio de 2007, pasando una temporada de unos 15 días solo en mi casa, debido a que el resto de mi familia se habían marchado de vacaciones para cartagena y me fue imposible acompañarlos porque estaba adelantando la tésis universitaria para graduarme. Aunque estaba solo, lo cierto es que todos los días venía un sobrino (mayor que yo) a utilizar la otra computadora de la casa por la misma razón que yo no pude viajar, él también estaba adelantando su tésis.

Cierto día, acababamos de almorzar por lo que yo me propuse a "recostar" la cabeza en la cama por unos minutos mientras reposaba el almuerzo a la vez que mi sobrino se sentó en el computador a proseguir con su labor, cuando de repente se escuchó un ruido de los mil demonios, como si la puerta del apartamento, que es de acero, la hubieran cerrado con mucha violencia. Ese estrepidante ruido me levanto inmediatamente y, como estaba aún entre dormido, por un instante pensé que había sido un sueño, pensamiento que descarté una vez me sobrino me miro y me dijo, ¿"Escuchó ese ruido"? Cabe mencionar que la puerta del apartamento siempre permanece cerrada y el computador donde él estaba está en frente de mi habitación, donde tengo mi cama y mi computador, por lo que tengo contacto visual directo con él todo el tiempo. Pero lo extraño no paro acá.

A eso de las 5:30 pm de ese mismo día, un primo mio llegó a visitarme debido a que por esas épocas él estaba viviendo en barranquilla y debía regresarse ese mismo día. Cuando yo le abrí la puerta, él entró y colocó el morral, la gorra y el celular encima del comedor (que se encuentra en la sala del apartamento) e inmediatamente nos dirigimos a mi habitación que es donde usualmente atiendo mis visitas. Mientras yo charlaba con mi primo, mi sobrino seguía en el computador trabajando arduamente en sus labores. En un momento dado, yo recordé que tenía en la nevera 2 bolsas de leche que supuestamente se habían vencido el día anterior, pero que todavía estaban buenas, por lo que les pregunté si se querían tomar un chocolisto. Ellos dijeron "de una" y me dirigí a la cocina a prepararlo. Por el camino, se me dio por decir "primo, voy a esculcarle el bolso a ver si trae las lucas" y el me dijo "no no no, dejeme eso quieto", sin embargo yo lo dije en tono de broma y ni siquiera me detuve en la sala, sino que del cuarto fui directamente a la cocina.

Cuando regresé con los vasos de chocolisto, seguí hablando con mi sobrino cuando salió el tema de que a él le estaba cayendo una niña de 14 años (el tenía en ese entonces 19) y me dijo que incluso ella le había escrito una carta a él, que la tenía en el bolso, por lo que yo le dije, "mentiroso, vaya me la muestra". Él salió de la habitación en dirección a la sala para buscar la dichosa carta, pero no tardó mas de 5 segundos en regresar con la expresión "Ey primo, ¿donde me escondió el bolso?".

Obviamente yo le expliqué a él que el bolso estaba en donde él lo había dejado y que yo en ningún momento lo había cogido, pero cuando fuimos a ver, solamente estaban encima de la mesa la gorra y el celular. El bolso había desaparecido por completo. Estuvimos buscandolo casi durante 15 minutos, mi primo llorando y con rabia porque él juraba que yo se lo había escondido y él tenía que estar en el terminal a las 7:30 pm para coger el bus de regreso a barranquilla.

Mientras él lo estuvo buscando en los cuartos, yo me dirigí a la cocina, exactamente a una habitación pequeña que hay en la parte de atrás de la misma que se supone es para la empleada pero que siempre la hemos utilizado como cuarto para guardar checheres, pensando en la remota posibilidad de que el bolso podría estar allá (anteriormente, muchas cosas que se perdían aparecían en esa habitación sin explicación alguna), pero no estaba por ningún lado a la vista. A los dos segundos mi primo aparecio de tras mio y me preguntó si ya lo había encontrado, que si ahí lo había yo escondido y yo le conteste, "nada, aquí no esta". Pero el, pensando aún que yo se lo había escondido, empezó a buscar en esa habitación y abrió un armario en el cual yo no había buscado y ahí estaba el condenado bolso, lleno de polvo como si ahí llevara mucho tiempo guardado.

A día de hoy, primo aún cree que yo le escondí el bolso, pero la verdad sigue siendo un misterio de cómo llegó allí.

Aclaración: Mi sobrino estuvo sentando en el computador todo el tiempo, lo aseguro porque lo veía directamente mientras yo estaba en mi habitación hablando con mi primo.