La súbita elección de Fiscal no fue, como dijo el presidente de la Corte, la demostración de que le cumplieron al país, sino la prueba de que le tomaron el pelo durante demasiado tiempo. Dieciséis meses poniendo excusas y en solo 48 horas resolvieron todo, incluido divisiones insalvables, como nuevos mejores amigos.
Antes consideraban crucial que el elegido fuera penalista, dados los casos que debe asumir el propio Fiscal General. Ahora importa un comino. Antes requerían 16 votos, pero a última hora optaron por rebajarlos a 14, que son los que sacó Viviane Morales... y Margarita Cabello, pero a esta nunca le alcanzaron.
No sé por qué me da la impresión de que Samper tiene algo que ver en toda esta vuelta. Hagamos memoria. Morales se quemó en su intento por regresar al Senado y por indicación de alguien resucitó hace un año para la vida pública en el noticiero de Caracol. Por eso, su nombre cae tan bien en los medios.
Además, me cuentan las lenguas viperinas, vieron muy activo a quien fuera el primer director del DAS del gobierno samperista, ayudando a cuadrar magistrados y ternados, aunque quién sabe si son habladurías. A Margarita Cabello, dicen, le ofreció una embajada, no sé con qué atribuciones, para que allanara el camino.
Y me aseguran que el ex DAS no fue el único que apaciguó ansias burocráticas de unos y otros. Será interesante conocer, dentro del periodo del actual gobierno, el destino de algunos togados cuando se retiren. ¿Terminará Augusto Ibáñez en la embajada de Suecia para trabajarse un espacio en la CPI? Claro que lo ideal sería descubrir el destino de los familiares, porque ahí es donde se mueve el carrusel de puestos.
Tal vez, por malévola, piensa una que Samper está interesado en el nuevo inquilino del búnker debido a las revelaciones sobre el magnicidio de Álvaro Gómez. Hay mafiosos hablando en USA, amén de una reciente investigación del crimen, y todo apunta hacia el mismo lado. Quién quita que al citado ex presidente le interese tener en la Fiscalía una ficha amiga. ¿Acaso no pretendía eso mismo Uribe con su primera terna?
Otra cosa que me llamó la atención fue ese empeño postrero en demostrar que Arrieta, favorito para ganar la elección, había menospreciado la gravedad de las famosas chuzadas en un programa de Hora 20. Resulta que uno de sus contertulios fue el referido ex director del DAS -el mundo está lleno de casualidades- y el rumor era falso.
Pese a todo, conservo la minúscula esperanza de que Viviane Morales no acepte ser marioneta del personaje a quien lanzó un salvavidas en 1995. Confío en que aprendiera algo de aquel error y admita que nunca debe cubrir con un manto de impunidad a un jefe por muy Presidente que sea. Quizá pueda trabajar con cierta independencia, y digo cierta porque total es imposible en la Fiscalía.
Morales es juiciosa, preparada, buena analista de radio y con fuertes convicciones religiosas, algo positivo. Pero no parecen armas suficientes para manejar no solo las presiones políticas, sino una entidad ineficiente donde conviven funcionarios decentes, comprometidos, con bandidos de cuello blanco.
Al margen de la titánica tarea de enderezar el buque varado, deberá optar entre agradar al universo mediático que la medirá, sobre todo por ciertas papas calientes que le dejó, porque quiso, Guillermo Mendoza, o cumplir su promesa de centrarse en acelerar los pleitos cotidianos de los colombianos de a pie. Veremos.
Salud Hernandez