¿Cree que las denuncias del ex senador Petro son sólo producto de una situación política interna del partido?

Ese problema con Petro se inicia al comenzar la administración de Samuel, cuando éste pide formalmente que le dejen presentar un candidato para la secretaría del Hábitat, otro para la de Planeación y un tercero para el Acueducto de Bogotá. También pidió que le dieran la Personería a su amigo Guillermo Asprilla. El Alcalde no quiso y ahí se creó el primer problema. Lo increíble es que Petro me tilda de clientelista, cuando él fue a pedir esos puestos... En otra oportunidad trató de hacer una lista al Congreso con Lucho y María Emma Mejía. Pero esas elecciones se las gano yo. Nunca aceptó mi triunfo.

¿Insiste en que sus denuncias son una cuenta de cobro?

Le estoy contando los motivos que tiene. Un día me pidió que sacáramos a Carlos Gaviria, pero no lo hice porque es uno de los activos del Polo. Otro, vino a proponerme un acuerdo para sacar a Robledo y al Moir. De nuevo me negué. Le dije que yo no hacía acuerdos para sacar gente.

¿Cree entonces que lo de Petro es un tema personal?

Sí.
A él lo han maltratado en el Polo...

Elegimos a Clara López y él salió a desconocer unas mayorías elegidas democráticamente. No nos perdona que no lo hubiéramos elegido presidente del partido. Ese el detonante mayor. Y lo que rompe el saco es que nunca aceptó el cuestionamiento que le hicimos de su reunión con Juan Manuel Santos, a espaldas de la decisión del partido. Son muchas cosas acumuladas.

No veo la necesidad de que disputas internas del partido deriven, como usted sugiere, en una campaña para desprestigiar a los Moreno...

Sí, porque la forma de ganar la lucha interna es la de desprestigiarnos a los demás. Pero también hay una gran coincidencia entre la forma amable como Petro trata a los Nule y al otro día Nule sale a hablar de cómo Álvaro Uribe e Iván Moreno están unidos a través de los grandes contratistas. Estoy convencido de que allí hay algo orquestado.

¿Orquestado contra quiénes?

Qué coincidencia que Petro sale a hablar del acuerdo de Álvaro Uribe con los Moreno, y Nule al otro día se viene lanza en ristre contra Uribe.
¿O sea que el complot es contra Samuel y Uribe juntos?

Eso es lo que está planteando Petro.

Con todo y eso, no veo por qué Petro le tenga a usted tal grado de animadversión como para montarle todos estos cuentos.

Además de lo enumerado, mi relación con Petro se agravó porque le pedí que explicara de dónde había salido la plata de su campaña: 1.860 millones de pesos que ingresaron en calidad de préstamo. ¿Quién se los prestó?

Dígame quién...

Un grupo de empresarios del chance del Tolima le prestaron la plata. Por eso hay una investigación abierta del Consejo Electoral.
¿Los chanceros son necesariamente bandidos?

No, pero que Petro diga cuáles son los buenos y cuáles los malos, porque siempre ha criticado esos aportes a las campañas presidenciales.
Me da pena hacerle esta pregunta, pero uno de los Nule salió a declarar que su esposa hizo gestiones con ellos para unas gasolineras...

Le voy a poner en plata blanca el caso de los Nule. El contrato de la 26 lo adjudicó Luis Eduardo Garzón, no Samuel Moreno. Esta Administración encontró tres negocios adjudicados por Garzón a los Nule, el de la 26 es uno, y se adjudicó a sabiendas de que iba a ser deficitario. Y encontramos también el negocio de las aguas y de las grúas.

¿Por qué los llama 'negocios'?
Bueno, adjudicaciones. Negocio era para ellos. Y en esos tres casos el Gobierno de Samuel Moreno se dio la pela de anunciarles casi la caducidad por incumplimiento y ellos aceptaron la cesión de sus contratos. En esta Alcaldía no ha existido protección para los Nule y están pasando la cuenta de cobro por eso.

¿Los Nule están resentidos contra usted y su hermano?
Exactamente. Han acudido por eso a la calumnia. Miguel Nule asegura que le pidieron un soborno del 6 por ciento a nombre mío, pero niega haberlo pagado. Y tiene el descaro de meterse con mi familia, diciendo que lo presionaron para que entregara unas estaciones de gasolina.

¿Ni usted ni su esposa tienen negocios con estaciones de gasolina?
Mi señora, sí. Está metida en el sector, incluso, antes de que fuéramos novios. Pero no tiene ningún vínculo con los Nule. Coja su carro y váyase por la carretera Bogotá-Girardot y dígame si ve alguna de esas supuestas estaciones.

Nule dice que el contrato lo redactó el abogado Alvaro Dávila. ¿Qué relación tiene usted con él?
Es un compañero de colegio. Nunca ha sido abogado mío ni he tenido un negocio con él. Lo he visto cuatro o cinco veces. Hay personas que utilizan mi nombre y no hemos logrado controlarlos.

¿Usted tiene algún interés comercial, alguna empresa por fuera del país?
Ninguna empresa.
(Después de hecha esta entrevista, el columnista Daniel Coronell revela que existe una sociedad comercial registrada a nombre de Iván Moreno en las Islas Vírgenes y dos abiertas en Miami, Florida).

¿Nunca ha suscrito un pagaré con Tapia, Gomez, Dávila o Nule?
Jamás. Y si mañana aparece uno, y tiene mi firma, pediré un informe grafológico, porque sería una falsificación.

Le digo que es muy de malas. Porque de la Alcaldía de Bucaramanga usted sale en medio de una controversia de corrupción idéntica a la que está viviendo la Alcaldía de su hermano. Y más de malas aún, porque se le incendió la Alcaldía, donde estaban todos los papeles de los contratos...
Le voy a aclarar eso. Inventaron que yo había mandado a quemar la alcaldía de Bucaramanga para tapar los procesos de mis investigaciones. Pero no tengo una sola sanción ni en la Procuraduría, Fiscalía o Contraloría por mi gestión como alcalde. Eso demuestra la transparencia con la que la manejé. Pero además, sólo un alcalde muy estúpido mandaría a incendiar la alcaldía cuando le falta tanto tiempo por delante. Si se manda a quemar, no se hace cuando faltan dos años de gestión.

Usted dijo en una entrevista que en el 2014 habría un Moreno en la Presidencia de Colombia. ¿Todavía lo cree?
Nunca lo dije. Lo que pude haber dicho es que ojalá algún día un Moreno llegue. Pero tenemos la experiencia de mi abuelo. Al general Rojas lo tildaron de corrupto. Lo juzgaron, lo absolvieron y después lo eligieron Presidente. Así mismo, cuando todo esto se investigue, la historia le dará la razón a la ciudad.

¿A la ciudad o al Alcalde?

Al Alcalde y a la ciudad, que es la gran beneficiaria de la renovación urbana de esta Alcaldía. En lo que a mí respecta, sólo puedo decir: ni he matado ni he secuestrado ni me he volado del país ni mucho menos he robado a nadie. Y aquí estoy, poniendo la cara ante todas estas infamias.