Una señora mayor va caminando por la calle. En eso pasa un joven ladrón, le apunta con un arma y le arrebata el bolso. Al buscar dentro del bolso, el ladrón encuentra muy poco dinero. Entonces le dice a la mujer:
"No es posible que tenga usted tan poco dinero. Seguramente debe tener más escondido."
Antes que la mujer pueda protestar, comienza a revisarla; por la cintura, el busto, debajo del vestido, por todos lados. Luego de un rato de buscar se da por vencido y pregunta a la mujer: ¿En serio no tiene más dinero?"
"En serio, no tengo más," contesta la señora, "pero siga buscando que yo le mandaré un cheque."