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#1 |
Staff Retirado Con Honores Denunciante Ultra
 |  Real Madrid le ganó a Espanyol por 3 a 0 y tomó provisionalmente la punta
Calificación: de
5,00
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No convenció el equipo de Mourinho ante un rival que presentó batalla pero que careció de la mala leche suficiente para asustar en el Bernabéu. Dio la sensación que el Madrid no podía ofrecer mucho más de los visto pero que ese nivel era suficiente para pasar el corte. Válido para sumar tres puntos pero muy poco para agradar a la parroquia blanca.
Ante un equipo plagado de gente joven e inexperta, sin sus grandes armas arriba, el Madrid se vio acosado en ciertas fases del partido y sufrió de lo lindo para encontrar espacios en la tela de araña blanquiazul. Sólo las expulsiones y el cansancio en el tramo final permitió a los de Mourinho fortalecer su moral de cara a los próximos compromisos.
Porque en la primera parte, por analizar de modo cronológico, el Madrid no encontró su sitio. Dominó, jugó en campo contrario pero le faltó fluidez, desborde y recursos para superar a un equipo ordenado y con criterio a la hora de salir con el balón jugado. Sólo le faltó profundidad a los de Pochettino, que impresionaron pero no dieron miedo, la misma sensación que ofrece un león enjaulado.
CR7 se resguarda a balón parado
El Madrid pisó más el área y se apoyó en los inicios en la movilidad de CR7 y Di María y sus intercambios en banda. Özil, como en Anoeta, resultó intrascendente para el juego de los de Mou. Y como en San Sebastián, el partido se decidió por una falta de Cristiano Ronaldo. Porque como decía, el Espanyol gustaba pero no era una amenaza. Así que el gol de CR7 de penalti tras una polémica mano de Luis García dejó el partido muy encaminado. Mano que fue y que el reglamento castiga pero que muchas veces se pasa por alto.
El gol anestesió el pacifico juego catalán y el Madrid se dejó llevar hasta el descanso. Un periodo apacible que pudo prolongarse de aprovechar Higuaín su primera ocasión en la reanudación. No lo hizo y el partido entró en una fase muy peligrosa para los de Mourinho. El Espanyol se animó y Casillas, inédito hasta entonces, tuvo que ganarse el sueldo con varias intervenciones de mérito.
Pepe abre la veda
Llegaron entonces los minutos locos. Pepe, alejado ejemplo de cordura, marcó el camino con una expulsión tan absurda como merecida. Un agarrón claro sobre Callejón, cuando ya tenía una cartulina, dejó al Madrid con diez. Tres minutos después, Clos Gómez equilibraba las fuerzas con un castigo riguroso para Galán por una entrada sobre CR7.
Con un jugador menos en cada equipo y más espacios, Mourinho optó por guardarse las espaldas ante el corre calles que se avecinaba. Khedira y Arbeloa por Di María y Özil. Casi nada.
Pero la jugada le salió bien y el Madrid acabó encontrando la mejor lectura posible al partido. Higuaín y Benzema afinaron su puntería y acribillaron a un Espanyol incrédulo por la excesiva condena. Mientras, el Madrid por fin encontraba esa estabilidad ansiada por Mourinho con la mejor receta posible, la del gol.
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