Para los que preguntan tanto ahí están algunos de los cargos de los que acusan al periodista, igual creo que será fácil estimar si los correos a los que reyes escribía pertenecen a willian garra.
William Parra Jaimes es uno de los periodistas más reconocidos en Colombia. Con más de 20 años en el oficio, ha pasado por importantes medios de comunicación como Caracol Radio, Noticias Capital, CM&, la agencia de noticias británica Reuters, TeleSur, y en el gobierno de Ernesto Samper fue su jefe de Prensa. Quienes lo conocen ven en él a un reportero nato, apasionado, contestatario. Un hombre sin secretos, desparpajado. Por eso, muchos se preguntan en qué momento terminó con una orden de captura por concierto para delinquir con fines terroristas, financiación a grupos ilegales y rebelión. Un juzgado penal de Bogotá emitió la orden por petición del fiscal Ricardo Bejarano. Al parecer, en el computador de Raúl Reyes, tras el bombardeo en Angostura en marzo de 2008, se encontraron documentos que dejan en evidencia la existencia de una comunicación entre 'el Periodista', 'Leonardo' o 'W' (seudónimos con los que, según la Fiscalía, se referían a William Parra) y Raúl Reyes.
La investigación señala que el periodista "ofreció sus servicios" para asesorar a la guerrilla. También sostiene que Parra, quien hoy está exiliado en Caracas, le informaba permanentemente a Reyes sus movimientos. Sus contactos, al parecer, comenzaron desde el 2001. Dicen los investigadores que le daba sus teléfonos y direcciones de correo electrónico al jefe guerrillero. Y lo más sorprendente: que en un viaje que el reportero hizo a Oriente Medio en 2006, cuando trabajaba para la cadena TeleSur, hizo contactos con palestinos para traerles armas a las Farc.
SEMANA conoció que en el famoso computador de Raúl Reyes se encontró un archivo que detalla un cruce de correos entre el número dos de las Farc y Parra. El periodista le cuenta al guerrillero que viajará a ese lugar y le pregunta si se le ofrece algo, a lo que Reyes responde que la organización necesita "artefactos de esos que nuestros amigos les han lanzado a los sionistas". Es decir, misiles.
Por eso Parra, a quien el desaparecido humorista Jaime Garzón satirizó con el personaje de William Garra, terminó con una orden de captura internacional, con su foto en una circular azul de la Interpol y llamado ante un juez en Colombia por terrorista.
"William era una persona muy inquieta, un enamorado de las ideas libertarias,. Él es incapaz de matar una mosca", dice su colega Juan Carlos Giraldo, quien lo conoció de cerca como reportero.
Parra trabajó con periodistas de la talla de Yamid Amat y Manuel Teodoro. Se metió en las entrañas de la guerra, entrevistó a jefes guerrilleros, paramilitares. Trabajó intensamente en épocas en las que el periodismo caminaba sobre una delgada línea en la zona de distensión del gobierno de Andrés Pastrana, cuando los periodistas accedían con facilidad a comandantes guerrilleros como Joaquín Gómez, el Mono Jojoy, Andrés París o el propio Reyes. Incluso, en 2005, desconocidos lo amenazaron, lo hirieron con arma blanca y le robaron el carro.
Su trabajo más reciente fue en TeleSur. Desde Bogotá, trabajó de la mano con su colega Jorge Enrique Botero. Allí estuvo entre 2006 y 2008, y después se fue para Caracas tras conocerse que su nombre aparecía en el disco duro de los computadores de Reyes. Parra ha dicho que todo es un montaje. "Yo reto al Fiscal General a que presente la primera prueba contundente, real, objetiva, (...) que me diga, por ejemplo, en qué país del Medio Oriente yo me reuní con alguien, ¿con quién me reuní?, ¿a qué organización pertenece?, ¿en qué momento yo negocié armas para las Farc?", dijo el reportero en una entrevista a TeleSur.
Aparentemente, lo más duro de los presuntos vínculos de Parra con las Farc son archivos hallados, no solo en el PC de Reyes, sino en varias USB encontradas en otros campamentos guerrilleros. No se le acusa de tráfico de armas porque no hay evidencia de ello. Además, extrañamente el fiscal que llevaba el caso fue relevado de su cargo a finales de la semana pasada. Habrá que ver si las pruebas contra el periodista y contra otras personalidades que también aparecen en los archivos del desaparecido jefe guerrillero son suficientes para catalogarlos como terroristas y colaboradores de las Farc.
Fuente: revista semana