Cuando a muchas personas se les menciona la fecha 11 de septiembre, seguramente lo primero que les llegará a la mente será el atentado terrorista contra el World Trade Center y otros atentados en Estados Unidos. Pero si en Chile preguntan por el 11 de septiembre, también este día es recordado por el golpe de Estado contra el gobierno de Salvador Allende, un atentado contra el pueblo y la democracia de Chile.
Ése es el otro 11 de septiembre, el 11 de septiembre de 1973, día en el cual las Fuerzas Armadas de Chile, en cabeza del nefasto general Augusto Pinochet y con la complacencia de la CIA, ejecutaron un golpe de Estado contra el gobierno de Salvador Allende, que posteriormente abriría el camino a 16 años bajo una dictadura militar, en la que se llevaron a cabo múltiples y reiterados crímenes de lesa humanidad que aún salen a flote hoy en día.
No obstante, el "9/11" chileno no tiene tanta preponderancia como el 9/11 norteamericano, pero tienen un factor en común: en 2001 el pueblo norteamericano sufría un ataque terrorista, mientras que en 1973 el gobierno norteamericano era cómplice y claro auspiciador de un atentado contra el pueblo chileno y su gobierno legítimamente elegido por el pueblo.
Contrario a lo que se pensaba y todavía se piensa, Allende fue elegido democráticamente por el pueblo de Chile y durante sus tres años de gobierno la calidad de vida de los chilenos mejoró ostensiblemente. La economía creció en promedio 10% y se promovieron políticas para mejorar la calidad en la educación y la salud, políticas que tuvieron su continuidad años después con el regreso de la democracia. Este crecimiento se contribuyó en gran parte a las iniciativas para la nacionalización de los recursos minerales y especialmente el cobre, que es el mayor sustento de Chile, aunque estas políticas a su vez trajeron un efecto adverso que fue el aumento de la inflación a tres dígitos. Obviamente habría quien no estaba contento con las políticas de Allende que beneficiaban a la mayoría del pueblo, y eran las multinacionales y empresarios norteamericanos, que estaban viendo amenazados sus intereses.
Ante la amenaza de los intereses extranjeros y la paranoia creada alrededor de Allende de que supuestamente "estaría listo para establecer una dictadura marxista", la CIA concertó un golpe de Estado, en conjunto con las Fuerzas Armadas lideradas por Pinochet, que terminó con un brutal ataque al palacio de la Moneda, en el cual perecería Allende. Días después, Pinochet toma el mando como Presidente de Chile, iniciando así 17 años de represión y crímenes incalculables, algunos de los cuales hasta hace poco siguen siendo revelados, crímenes que no pueden ser opacados con las políticas económicas a las que le atribuyen el que hoy en día Chile tenga niveles de vida óptimos.
Hace 37 años, un día como hoy, 11 de septiembre, un hombre que inspiró el anhelo del pueblo por cambiar las cosas, fue vilmente asesinado por los intereses de las corporaciones y los empresarios extranjeros.
"Era una llama al viento, y el viento la apagó" - Porfirio Barba Jacob