Al amigo y al caballo no hay que abusar de ellos.
Es mejor un mal arreglo que un buen pleito.
Es mejo tener crédito que plata.
El acero viene en barras.
El acomedido como de lo que está escondido.
Quien adelante no mira, atrás se queda.
Del agua mansa líbrame Dios, que de la brava me libro yo.
Lo que por agua viene, por agua se va.
Lo que no cura el aguardiente es cáncer.
El que con lo ajeno se viste, en la calle lo desvisten.
Algo es algo, peor es nada.
En la cárcel y en la cama, se conocen los amigos.
La amistad va por un lado, y el negocio por otro.
Amor, tos y humo no se pueden esconder.
Dime con quien andas y te diré quien eres.
Antioqueño no mea solo.
Las apariencias engañan.
Los años no viene solos.
En el árbol caído, hasta los perros se mean..
El que no arriesga, no gana.
El arte no está en mear mucho, sino en hacer espuma.
Lo barato sale caro.
Barriga llena, corazón contento.
Macho que bebe no se asolea.
Dios le da pan al que no tiene dientes.
Al bobo se le aparece la virgen.
No hay como una cara de bobo bien manejada.
Ni tan bonita que mate, ni tan fea que espante.
Lo bueno no dura.
El bulto sabe a quien le sale.
No hay que buscar el ahogado río arriba.
Una cosa es cacarear y otra poner huevos.
Al que no quiere caldo se le dan dos tazas.
Al hombre sin plata, la cama lo mata.
Mientras más canas, más ganas.
Cada quien hace de su culo un balero.
El perro y el niño según el cariño.
De la carrera no queda sino el cansancio.
La cáscara guarda el palo.
Al mejor cazador se le va la pava.
En tierra de ciegos, el tuerto es rey.
Hombre cobarde no goza mujer bonita.
Más vale un cobarde vivo que valiente muerto.
Lo cortés no quita lo valiente.
Del cuero salen las correas.
De cucaracha para arriba, todo es cacería.
El que a cuchillo mata, a cuchillo muere.
Bueno es cilantro, pero no tanto.
La culebra hay que matarla por la cabeza.
De eso tan bueno no dan tanto.
Cuando uno está de malas, hasta los perros lo mean.
Es mejor deber plata que favores.
Cagado un dedo, cagada toda la mano.
Lo que viene derecho, no trae arruga.
Desde al desayuno se sabe que va a ser el almuerzo.
La peor diligencia es la que no se hace.
Las cosas no son del dueño, sino del que las necesita.
Lo que ha de empeñarse, que se venda.
Si no puedes vencer al enemigo, únete a él.
Desde que el enfermo coma, no hay peligro.
Levantando las enjalmas, se ven las peladuras.
No hay que ensillar antes de traer las bestias.
A un buen entendedor, con pocas palabras bastan.
Nadie escarmienta por cabeza ajena.
Cada cual se estira hasta donde la cobija le alcance.
La experiencia es como la mierda...Nadie la coge.
El que feo ama, bonito le parece.
No hay que confundir la formalidad con la güevonada.
El frío conoce al desnudo.
Gallina vieja da buen caldo.
Gallinazo no come alpiste.
Gallo fino no extraña gallera.
El día de gastar se gasta.
Genio y figura hasta la sepultura.
Una golondrina no hace verano.
Es mejor la gotera que el chorro.
Es mejor caer en gracia que ser gracioso.
De grano en grano la gallina llena el buche.
Al que le caiga el guante, que se lo chante.
Guerra avisada no mata soldado.
No hay que darle gusto al diablo.
Después del gusto, que venga el susto.
El hábito no hace al monje.
En casa de herrero cucharón de palo.
Hombre prevenido vale por dos.
Todo el mundo es honrado hasta que lo cogen.
Imposible mujer mear en botella.
Un pobre no puede ver a otro con jíquera.
El que juega, pierde, y el que bebe se emborracha.
Al ladrón hay que darle las llaves.
La ley se hizo para los de ruana.
Cada cual es libre de hacer de su culo una ratonera.
Mas vale llegar a tiempo que ser convidado.
El que no llora, no mama.
Loro viejo no aprende hablar.
La lotería es el impuesto de los tontos.
La luz que va adelante es la que alumbra.
Por mucho madrugar no amanece más temprano.
A mal que no tiene cura, hacerle buena cara.
Mal de todos, consuelo de bobos.
No hay mal que dure cien años, ni cuerpo que lo resista.
Más vale malo conocido, que bueno por conocer.
Del marrano, solo pierde el chillido.
Matrimonio y mortaja del cielo baja.
Al miedo nadie le ha puesto calzones.
No hay que confundir la mierda con la pomada.
No todo lo que brilla es oro.

El pato se conoce por la cagada.
El que ama el peligro en el perece.
Una cosa piensa el burro, y otra el que lo está enjalmando.
A perro paseador no le falta el garrote.
El que quiere pescado, se tiene que mojar el culo.
Por que se muera una vieja, no es peste que anda.
Del pinche no queda sino el plumero.
El hombre promete mientras mete.
Pueblo chiquito, infierno grande.
El día de la quema se verá el humo.
Por que te quiero, te aporrio.
El que tenga rabo de paja no se arrime a la candela.
En río revuelto, ganancia de pescadores.
El que a solas se ríe. De sus picardías se acuerda.
Donde saca y no se echa, se acaba la cosecha.
Lo que no sirve estorba.
La soga se revienta por donde la muerde el perro.
Más vale solo que mal acompañado.
En tiempo de guerra no se oye misa.
Media vara no es desplome.
En la variedad está el placer.
El que va pa'viejo, va pa'pendejo.
El que es verraco, con una sola güeva tiene.
El que siembra vientos cultiva tempestades.