Jacqueline Saburido es una joven venezolana que viajó a Austin, Texas (EE.UU) para estudiar inglés. Tenía 20 años en 1999. Anteriormente descrita a sí misma: “Chica de Universidad” quien disfrutaba nadar, bailar flamenco y pasar tiempo con su familia y amigos. Un mes después de su llegada, cuando regresaba a su casa en automóvil con amigos, luego de un cumpleaños, un conductor borracho provocó un accidente que le causó la muerte a dos de sus acompañantes, heridas a otros dos y quemaduras gravísimas a ella, que la desfiguraron por completo.