Camila.
Camila no te escondas tras tu voz,
aparece en el mundo,
devélate, hazte verdad, hazte realidad,
no sigas atesorándote de mi mirada,
de las ganas de mis manos de tocar tus manos,
de los anhelos del sueño que se va impregnando
de yermos que dejas cuando tu imagen no aparece.
Camila, aparece de la nada –como la primera vez-
y abraza mi corazón anhelante de ti,
no te esfumes en tiempos virtuales de veinte minutos,
quédate aquí, conmigo, pues si marchas estarás dando la espalda
al sol que desde siempre ha deseado calentar tu cuerpo
entregándote lo que mereces.
Camila, no te vayas, solo promete en esta noche de soledades
que serás la luz en medio de tantas sombras,
que serás más que una ilusión, serás el todo, principio –y final-
perenne de lo que siempre mi cansado corazón
ha esperado mientras el mundo no se detiene.
Samuel Salazar Blandon.
02.06.2010.