Leonardo Prada Quintero, de 29 años, no soportó un no de la hija de una prima suya y la asesinó.



El macabro caso sucedió en la vereda El Carmen del municipio de Onzaga, 187 kilómetros al suoriente de Bucaramanga, donde el 3 de junio pasado desapareció la niña después de salir de la finca de sus padres, para buscar aguacates y yuca para la alimentación de su familia.


Ese día, la adolescente se encontró con Prada y él la acompañó para insistirle en que lo aceptara como su novio, pues ella tenía ya una pareja en el vecino municipio de San Joaquín.
De acuerdo a lo narrado por una fuente de la Policía de Santander, Prada no toleró el rechazo de la niña y la mató con su hacha, enterrando las extremidades y el tronco en una fosa, que cubrió con piedras, a cuatro horas y media del caserío en el que vivía la niña.


Al día siguiente, los padres de la menor le preguntaron a Prada por el paradero de su hija y el campesino, que vestía la misma ropa del día del crimen, les aseguró que ella se había marchado para San Joaquín, situación que el novio desmintió.
Las partes del cuerpo de la niña, excepto su cabeza, fueron hallados por los investigadores de la Policía y Fiscalía, que de inmediato relacionaron el hecho con el labriego.
En las pesquisas se utilizaron medios técnico-científicos, como las luces forenses que se implementan para ubicar residuos (en esta ocasión fluidos se sangre en el lugar de los hechos), y que permitieron ubicar las partes del cuerpo.


Luego de ser llevadas los restos al laboratorio de criminalística para su confrontación de ADN se pudo establecer que pertenecían a la victima y el domingo pasado fue capturado Leonardo Prada.
"Fue un crimen pasional que lo deja a uno perplejo, pues cuando fue conducido hacía la Fiscalía, de manera fría, el hombre narró los hechos", aseguró el coronel Mario Pedroza Sandoval, comandante de la Policía de Santander.


El asesinó confesó que había asesinado a la adolescente, reveló el sitio donde estaba enterrada la cabeza y en audiencia de imputación de cargos, el Juzgado Tercero Promiscuo Municipal de San Gil con funciones de Control de Garantías, le impuso medida de aseguramiento en el centro carcelario de Berlín (Socorro), por el delito de homicidio agravado.


Tomado de eltiempo.com