Este es el tercer ataque en tres días en una escuela, y el quinto en pocas semanas.
Un hombre se inmoló quemándose tras herir a cinco niños con un martillo en una guardería en China, poniendo de manifiesto los problemas sociales en el país cuando intenta mostrar su mejor cara al mundo.
Dos niños fueron arrebatados al hombre después de que se rociara de gasolina y se prendiera fuego en una guardería en Weifang, en la provincia costera de Shandong, dijo la agencia de noticias Xinhua.
Los cinco niños heridos estaban estables, añadió. El tercer ataque en tres días en una escuela, y el quinto en pocas semanas, tiene lugar cuando el Gobierno está reforzando la seguridad de cara a la inauguración el 1 de mayo de la Exposición Universal en Shanghái, la ciudad más sofisticada del país.
Los ataques han tenido lugar en ajetreadas ciudades provinciales, lejos de los brillantes rascacielos y oficinas internacionales de las ciudades más ricas del país.
El jueves, el dueño de una tienda de copias de 46 años apuñaló a 29 niños, dos profesores y un guardia de seguridad en una guardería de Taixing, en la provincia de Jiangsu, unas pocas horas río arriba desde Shanghái.
Los tenderos de los alrededores le redujeron en el patio tras golpearle con un extintor, según contaron a Reuters.
"Cuando entramos, los niños estaban paralizados, no reaccionaron para nada. Algunos estaban de pie, otros tumbados o sentados en el suelo", dijo el propietario de una tienda de ropa Shan Aijun.
"No reaccionaron. Sus cuellos y cabezas estaban llenos de heridas".
Reuters