El delantero guaraní y Gerardo Martino tuvieron un pequeño encuentro en la clínica de rehabilitación en Buenos Aires, donde el jugador se recupera del balazo que recibió en la cabeza hace dos meses.
Cabañas tuvo contacto con el balón de fútbol y pateó al arco durante un buen tiempo para demostrarle al seleccionador paraguayo que se está recuperando bien y que quiere estar en Sudáfrica.
Así mismo, la Asociación Paraguaya de Fútbol (APF) difundió la primera fotografía del atacante Salvador Cabañas en una clínica de Buenos Aires, donde sigue su recuperación tras el balazo en la cabeza que sufrió hace dos meses en un bar de México.
En la imagen, el futbolista aparece parado, posando en un campo deportivo de la clínica de rehabilitación con directivos de la APF y el técnico de la selección paraguaya, el argentino Gerardo Martino.
La fotografía fue hecha pública un día después de la primera visita realizada al jugador por una delegación de la APF luego de ser trasladado de la capital mexicana, el pasado domingo.
Por su parte, el Canal 4 de televisión emitió imágenes en las que se observa de lejos al delantero albirrojo y del América de México pateando balones al médico de la APF, Celso Fretes, en el mismo campo deportivo.
El delantero, de 29 años, "parecía muy espontáneo y con innatas condiciones técnicas respecto al fútbol", expresó a ese medio el neurocirujano, que en México representó a la APF en el seguimiento de su caso.
El ídolo de la selección que disputará el Mundial de Sudáfrica abandonó el hospital de la Ciudad de México el pasado 2 de marzo y semanas atrás dio la primera declaración a la televisión de ese país, en la que expresó que pronto volvería a los campos.
Cabañas abandonó México sin rendir declaración sobre los hechos en los cuales fue herido de un balazo en la cabeza el 25 de enero pasado en los baños de un bar de la capital mexicana, donde estaba con su esposa y su cuñado.
El futbolista todavía tiene alojada en su cabeza la bala con la que fue herido por un hombre que está siendo buscado por la Policía en todo México.
Reuters