La suegra que estaba quedándose sorda llegó a la casa del yerno, quien sabía muy bien de su sordera.
La recibió diligentemente, abrió la puerta, y con una sonrisa la saludó diciendo:
- Adelante, vieja hijueputa...
¿De dónde viene la malparida con esa cara de bruja
A lo que la suegra responde...
- De comprar un hijueputa audífono malparido !!!!.