Que una actriz acepte
desnudarse en algún momento de su carrera, es cuestión de tiempo. Y si no que se lo pregunten a Ashley Greene, quien decidió
posar desnuda para la revista
Sports Illustrated en su edición
Swimsuit Issue.
¿Una buena manera de iniciar el año? Bueno, para ella sí; para los que la querían ver
100% desnuda, no tanto.
Porque
Sports Illustrated no es una revista que se especialice en
desnudos, no, algo tiene que ver con los deportes, marcadores y todo eso.
Por eso la actriz de
Crepúsculo aceptó desnudarse, porque no se le vería nada que no quisiera dejar a la imaginación.
Esa es la magia del
body painting. Así, Greene deja ver su
cuerpo desnudo, pero con mucha pintura de lo más colorida. Aunque muchos dirían que es más un efecto óptico que otra cosa.
La verdad es que he visto desnudos más completos, cuando de
body painting se trata, en televisión. Ni un
pezón ni nada; esa es otra clase de magia, la de los parches. Sea como sea estoy seguro de que al menos es un primer paso, y que sus fanáticos estarán más que contentos.