Por: Fermín Romero


1.200 representantes de 76 comunidades que habitan la región fronteriza entre San Vicente del Caguán (Caquetá) y La Macarena (Meta) denunciaron en la inspección de San Juan de Lozada que hombres armados han venido haciendo presencia en las veredas Los Pozos, La Aurora y Las Delicias.
Según las denuncias, el 5 de noviembre, hombres que se presentaron como Autodefensas del Llano exigieron pagos según bienes y aclararon a la comunidad que actúan de manera conjunta con la Fuerza Pública, hecho que ha generado desconfianza y miedo en los pobladores. En la región se encuentran cuatro brigadas móviles del Ejército, todas ellas hacen parte de la Fuerza de Tarea Conjunta Omega y, de acuerdo a testimonios de los pobladores, su acción se concentra en las zonas pobladas por las comunidades afectadas, las mismas en las que, desde hace un año, la empresa Emerald Energy realiza procesos de exploración petrolera.


Sin embargo, la intimidación en la región no termina allí: además de la presencia del grupo paramilitar, los habitantes denuncian que, en una pasada reunión entre el ministro del Interior y de Justicia, Fabio Valencia Cossio; el gobernador del Meta, Darío Vásquez Sánchez; y el alcalde del municipio de La Macarena, Eliécer Vargas Moreno, los dos últimos acusaron a los habitantes de la región de pertenecer a la guerrilla.

Los habitantes de la zona han pedido la inmediata intervención de los entes de control y de organizaciones de derechos humanos para proteger sus vidas, por temor a futuras incursiones paramilitares en sus cumunidades.