Jaimito, a sus tiernos 5 años, jugaba con su tren en miniatura en la sala de su casa, mientras su mamá cocinaba y le miraba de vez en cuando.
Luego de varias vueltas del tren, éste llega a la Estación Terminal y Jaimito, asumiendo el papel de inspector del tren, dice:
"Estación Terminal...! Todos los malparidos que viajan hasta aquí, tomen todas sus maricadas y se bajan rapidito del tren, sarta de guevones! y los hijueputas que viajan de vuelta, se suben rápido con su mierda de maletas, antes que les agarre a patadas el culo!"
Al oír esto, su madre espantada sale rápidamente de la cocina y le dice a Jaimito: ¿Pero que vocabulario es ese, hijo? Deja inmediatamente tu tren y andate a tu cuarto... quedas castigado por DOS horas!“.
Luego de las dos horas de castigo Jaimito vuelve a jugar con su tren y esta vez dice:
Estación Terminal...!, los pasajeros deben descender!. En nombre de nuestra empresa les agradecemos haber viajado con nosotros. Por favor, bajen todas sus pertenencias y ante cualquier incomodidad o duda, sírvanse solicitar ayuda de nuestros asistentes que los atenderán con gusto. Quienes viajen de vuelta, por favor tengan la bondad de subir al tren con su equipaje y acomodarse en sus respectivos asientos que vamos a partir.!”.
Su madre, con una sonrisa de satisfacción y tranquilidad sigue cocinando, pero Jaimito agrega:
"... y si algún malparido esta enojado por las hijueputas DOS horas de atraso que se pare y le reclame a la vieja gorda, fea, tetona y culi seca que está en la cocina"