Respuesta: Leyendas urbanas de la tradicion oral de medellin
- Aseguran los conocedores de la vida social que durante el mandato de un presidente de
la república , éste se enamoró perdidamente de un famoso gay de la ciudad, probablemente el marica más carismático y popular de la región, famoso por su pinta, gracia y extroversión. Con malicia se presentaba como “El primer damo de la nación” y su romance trascendió los chismes de la época, así como las rumbas y las expresiones de pasión del uno por el otro. Ya viejo, terminada la relación pero no su afición por la juerga y la francachela de alto nivel, recuperó su prestigio y vigencia social al organizarle las más grandes fiestas y bacanales al presidente de turno, uno de los sibaritas y rumberos más reconocidos que recuerde este país del sagrado corazón. Eran de antología sus fiestas a lo romano, sus bailes de disfraces y su colección de mozuelos y jovencitas ávidos de diversión para disfrute de tan encopetados personajes. Mucha gente asegura haber estado en tales reuniones o conocer a quien lo hizo.
- La historia de la chica que el día de su cumpleaños pelea con el novio. En un centro comercial se encuentra con un exnovio, se toma unos buenos tragos y decide invitarlo para la casa a terminar la velada, aprovechando que sus padres estan supuestamente en la finca; al cabo de un rato de estar demostrándose apasionadamente sus afectos reprimidos y cuando estan completamente desnudos, se encienden las luces y una muchedumbre grita: ¡Sorpresa, Feliz cumpleaños!, entre ellos el atónito y engañado novio quien con los padres de la casquivana habían decidido celebrarle a escondidas el onomástico, fingiendo la discusión y la ida para la finca, convencidos que ella regresaría sola a la casa. Los sorprendidos ciertamente fueron todos. A uno se la cuentan con asesinatos o suicidios de por medio, con translados de la ciudad o al exterior luego de la vergüenza, con confinamientos en conventos y toda suerte de finales escabrosos. Muchos juran haber sido testigos o conocer a los protagonistas.
__________________ mejor tres años de aventura que treinta años cavando mi sepultura |