La llegada de Raúl Castro no ha se ha traducido en una mejora de la situación en la isla.
Wsa es la conclusión del nuevo reporte de la organización Human Rights Watch (HRW) que fue entregado este miércoles en Washington.
El informe, titulado 'Un nuevo Castro, la Misma Cuba', sostiene que los cubanos siguen siendo encarcelados sólo por expresar su opinión e incluso "preventivamente", sólo por la sospecha de que podrían cometer un delito en el futuro.
Dice, además, que las decenas de presos políticos que "heredó" Raúl de su hermano Fidel, continúan padeciendo por las mismas precarias condiciones de su encarcelamiento.
"En lugar de desarticular la maquinaria represiva de Cuba, Raúl Castro la ha mantenido plenamente activa", señala el informe en uno de sus apartes.
De acuerdo con José Miguel Vivanco, director para las Américas de HRW, "los cubanos que se atreven a criticar al Ggobierno viven bajo un temor constante, pues saben que pueden terminar en prisión tan sólo por expresar su opinión".
Peligrosidad'
El reporte hace especial mención a la disposición de "peligrosidad" que contiene el Código Penal de Cuba, y que permite a las autoridades encarcelar a las personas antes de que hayan cometido un crimen.
Según HRW el informe, que cuenta con 123 páginas, es el resultado del envío de una misión a la isla y de más de 60 entrevistas con implicados, que les permitió documentar 40 casos de personas que fueron encarceladas por el Gobierno en virtud de esta disposición.
La organización menciona el caso, por ejemplo, de Ramón Velásquez Toranzo, que inició una caminata pacífica a través de Cuba para exigir el respeto de los derechos humanos y la liberación de todos los presos políticos, y terminó detenido y condenado a tres años de prisión en enero del 2007.
También el de Raymundo Perdigón Brito, un periodista que escribía artículos en los cuales documentaba los abusos del Gobierno y que eran publicados en sitios web extranjeros.
De acuerdo con HRW, Perdigón fue condenado a cuatro años de prisión y ha sido objeto de golpizas por parte de los guardias cubanos.
El informe menciona, a su vez, como el régimen recurre a otra serie de leyes para acallar la libertad de expresión, suprimir los derechos laborales y penalizar todas las formas de disenso.
"Los defensores de derechos humanos, periodistas y otros miembros de la sociedad civil que son juzgados en virtud de estas leyes son objeto sistemáticamente de violaciones del debido proceso, como interrogatorios abusivos, denegación de asistencia letrada y juicios que no son más que una parodia", concluye la ONG.