Denunciante Bronce
 |  Viaje en el bus de la esperanza, que da estudio, salud y afecto a 5 mil niños de comunas de Medellín
Calificación: de
5,00
 |  A las 7:30 de la mañana, bajo un cielo gris, Miguel y María salen de una pensión del centro de Medellín. Van en compañía de su madre a esperar el bus para ir al colegio.
Los dos hermanos, de 4 y 2 años, viven en un cuarto de seis metros cuadrados que es cocina, baño, comedor, sala y dormitorio. Al cruzar la puerta está el patio de juegos, un corredor largo y oscuro que expide un olor fuerte que se confunde entre el mugre, la orina, la basura y el bazuco. Viven en una residencia en el centro de Medellín, lugar de trabajo de prostitutas y uno de los más grandes expendios de droga de la ciudad. Es desde allí donde todas las mañanas salen a esperar su transporte, El bus de la esperanza, un programa de la Fundación de Atención a la Niñez (FAN), que en un vehículo recorre los inquilinatos para recoger a más de 100 niños entre los 6 meses y los 6 años para llevarlos a las escuelas que tiene la entidad. El entorno en el que crecen estos pequeños sustenta la causa de la FAN por ayudar a menores en situación de pobreza, donde el hambre y el peligro son el pan de cada día. "Como no era posible ponerles un centro infantil en este sitio, pues no cuenta con un entorno adecuado y la idea era precisamente sacarlos de allí, ni encontrábamos la estrategia para hacer que las madres madrugaran a llevar a los niños, o que ellos pudieran llegar, optamos porque la mejor forma de llegar a ellos era con un transporte escolar", dice Luz Amalia Botero, directora de la fundación. Los niños han vuelto a reír
A esos colegios llegan algunos aún en pijama y allí los bañan, les dan desayuno, almuerzo y todo un día recreación. "Al principio teníamos que entrar a los 'hoteles', tocar las puertas. Las mamás nos gritaban groserías y que las dejáramos dormir", recuerda Botero, mientras recibe a Miguel y María de los brazos de Kelly, su madre, para embarcarlos en la ruta. Además de brindarles alimentación y educación, los niños reciben atención médica y sicológica, como es el caso de este par de hermanos que están en tratamiento odontológico, pues, por la falta de aseo, perdieron algunos incisivos. Lo más importante es que Miguel, María y muchos de sus vecinos y amigos pudieron salir de la oscuridad y ahora tienen la oportunidad de ver la vida de colores, de correr, bailar, comer y dormir en un lugar limpio, acompañados de un grupo de profesoras que diariamente los reciben con un abrazo y un beso. El bus de la esperanza es un programa de la FAN que, con el apoyo de la empresa privada y de la Secretaría de Educación, ayuda a 5 mil niños de 36 barrios en 10 comunas y cuatro corregimientos. La FAN fue creada hace 50 años con el nombre de Almuerzo navideño, por el alcalde Jorge Restrepo y su esposa Lucila Jaramillo, para dar educación a los desplazados de la violencia bipartidista. Ahora, varias veces al año reúnen fondos para organizar paseos a fincas con los niños y sus padres, con el fin de restablecer el vínculo madre-hijo. "Sacar esos niños de los 'hoteles' garantiza que tengan una buena nutrición y, sobre todo, amor, porque somos conscientes de que el vínculo afectivo que tenían era nulo", concluye Botero. ANGÉLICA CERVERA AGUIRRE
ESPECIAL PARA EL TIEMPO
MEDELLÍN
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