ALGUN DIA
Algún día te escribiré un poema
que no mencione el viento y la noche
siendo el amor su único tema
sin odio, sin dolor y sin reproche
Algún día te escribiré unos versos
sin pájaros, sin jardines y sin flores
calidos, suaves, fulgidos y tersos
sin hablar de cielos ni colores
Algún día te escribiré un soneto
sin mares, sin luna y sin estrellas
quizás tal vez será un cuarteto
que solo diga amores sin querellas
Lo que te escriba tendrá la suavidad
de una caricia deslizada en tu piel
que se prolongue hasta la eternidad
en un beso de sabor a ojimiel
Poema que eluda las comparaciones
las metáforas y palabras sin sentido
rimas en el ritmo de tus pulsaciones
y la métrica cambiar por un latido
Te escribiré en un poema, una bella canción
la música nacida en el fondo de mi corazón
en una partitura de la más sublime creación
que cantara al amor y a la vida su razón
Algún día te escribiré algo, con olor a mí
que convierta en palabras tu mirada
y lo escribiré solo pensando en ti
con la intensidad de un alma enamorada
Esperándote.
Cuando partes,
dejas una ausencia, dejas una sombra,
el alba de tu caricia, la locura de tu beso.
Cuando partes,
siempre dejas que se acabe el tiempo de las palabras,
solamente dejándome una caricia en el rostro.
Cuando partes,
me dejas una mirada llena de incertidumbre,
dejas a mis manos habitadas de cataclismo con derrumbe.
Me dejas el mismo silencio, la misma angustia.
Pero anoche dejaste los ojos, la boca, las manos,
con una palabra prendida en el alma:
“vuelvo”.
Un amor en tranvía...
Se desfiguraba su carita,
entre la capa húmeda del tranvía,
yo desde el trafico de la estación le observo,
mientras lee con dulce atención un libro. Inquietado desde el suelo,
por no concordar con nuestros destinos,
por no compartir un previo boleto,
me desanimo…
Y aun contemplo sus ojos lectores tan bellos. La lluvia desnuda mi atrevimiento,
arrastra mi arrugada cobardía,
mientras barro mi antiguo destino,
cambio de boleto,
con la cálida impresión de sentir su aliento. Instantes, cerca de emprender la marcha,
me acerco al tranvía con maletas rozando mis piernas,
y que suerte, junto a ella mi asiento,
solos en el viaje con eternos besos…
DESPUES DE UN SALUDO DE LA DIOSA SE ME QUITO LA TRISTEZA POR LO DE LA SELECCION.....QUE FELICIDAD VER QUE PINK NO NOS OLVIDA