Respuesta: La Cripta Embrujada (resuelva el misterio)
La familia se sentía insegura, y su misma inseguridad les hizo negarse a abrir de nuevo el mausoleo. Pero tuvieron que acceder tres meses más tarde, cuando murió uno de ellos. Quitaron los sellos a la puerta y penetraron unos hombres en la cripta. Los ataúdes volvían a encontrarse en el centro, lejos de su sitio.
Depositaron el ataúd del difunto en uno de los nichos vacíos, pusieron orden en los demás, cerraron la puerta con varios sellos y abandonaron el panteón. Después se reunieron a discutir con las autoridades. No deseaban que nadie fuera a acusarlos en la ciudad de vampiros ni de profanadores de tumbas. Pidieron a las autoridades que solucionasen el misterio. El barón Goldenstubbe, presidente de la comisión investigadora, acudió al panteón acompañado por varios miembros de la familia Buxhoeden. Habían transcurrido tres días desde el sepelio. Los sellos seguían intactos. Abrieron la puerta y aparecieron los ataúdes fuera de su sitio.
El barón ordenó colocarlos otra vez cada uno en su nicho, cerró personalmente la puerta y designó un guardia para vigilar la tumba día y noche. A continuación pidió al obispo y a dos médicos que lo acompañasen al día siguiente al mausoleo.
Abrieron la puerta. Esta vez seguían en su sitio tres ataúdes. Los demás estaban ya amontonados en el suelo. Los médicos abrieron unos ataúdes al azar, en busca de huella de vampirismo. Verificaron el estado de los cuerpos y comprobaron que estaba todo en perfectas condiciones. Incluso los difuntos conservaban las alhajas con las que fueron enterrados.
Unos obreros abrieron los muros en busca de pasajes secretos. Cerraron finalmente la puerta y quedaron apostados varios guardianes. Días más tarde declararían que no oyeron ni vieron nada sospechoso. El barón Glodenstubbe ordenó abrir de nuevo el mausoleo. Volvían a estar revueltos los ataúdes. En vista de que el asunto no parecía tener solución, y para evitar males mayores, el barón ordenó trasladar los féretros a otro lugar y demoler la tumba de los Buxhoeden.
Regresó la paz al panteón de Arensburgo. Pero nunca logró averiguarse, igual que sucedió en la isla Barbados, por qué a los ataúdes de plomo les gusta danzar y asustar a la gente inocente .
__________________ DIOS Existe |