6. La sangre de San Genaro Cada primer sábado de mayo y todos los 19 de septiembre se licúa milagrosamente la sangre seca de San Genaro, el patrón de Ñapóles. 
Esos días una procesión pasea una ampolla con la supuesta sangre del santo que, según la hagiografía católica, fue un obispo decapitado por el emperador Diocleciano (284-305).
El fenómeno. El milagro se lleva produciendo
600 años y los napolitanos están convencidos de que, si no sucede, un gran desastre les aguarda. Así ha pasado en varias ocasiones, como la plaga que asoló la ciudad en 1527 y el terremoto de 1980, en el que murieron 3.000 personas.
El timo. Cuando en 1799 el ejército francés entró en Ñapóles, el clero profetizó que el milagro no sucederia. El general francés Jean Étienne Championnet ordenó a su ayudante: "Dígale al sacerdote que si la sangre no se licúa en cinco minutos, hago bombardear Ñapóles". Poco tardó en producirse el milagro.
La licuefacción no se produce sólo los dos días de procesión: lo hace más de doce veces al año. La Iglesia no permite tomar una muestra de la sustancia. Sólo se han podido realizar análisis espectroscopios a través de la ampolla, que determinan que contiene sangre, aunque puede haber algo más.
La explicación. Hace unos años, la revista /Vaturepublicóquela sangre de San Genaro es una mezcla tisotrópica, que se solidifica y se licúa si se agita convenientemente. El profesor de química orgánica de la Universidad de Pavia, Luigi Garlaschelli, reprodujo el milagro con una mezcla de caliza, cloruro de hierro hidratado y agua salada. El mago estadounidense Joe Nickell hizo lo propio con aceite, cera y sangre de dragón, una resina roja que se hace con diferentes vegetales.
En España también se produce este milagro cada 26 de julio con la sangre de San Pantaleón, que se guarda en el altar mayor del Real Monasterio de la Encamación de Madrid, junto con un hueso del santo. Al igual que con San Genaro, no sabemos si lo que encierra la ampolla es sólo sangre. Pero hay un detalle llamativo: fue donada al monasterio por el virrey de Ñapóles.
7. La maldición de Tutankamon
Los arqueólogos que intervinieron en el descubrimiento de la famosa tumba del emperador egipcio murieron en circunstancias misteriosas
Cuando falleció un miembro de la excavación, Lord Camarvon, pocos meses después de la apertura de la tumba, se extendió la idea de que su muerte se debía a una maldición.
El fenómeno. Un periódico publicó unos jeroglíficos que supuestamente estaban en la entrada del lugar: "Quien entre en esta tumba sagrada será visitado muy pronto por las alas de la muerte". En menos de un año cayeron el hermanastro de Carnarvon, su enfermera, un médico que radiografió la momia y un millonario que había estado allí. Hasta el canario de Howard Cárter, el descubridor de la tumba, había sido devorado por una cobra el día en que iba a ser abierta.
El timo. La supuesta inscripción nunca existió. En total murieron seis personas, de las 26 que estuvieron directamente implicadas en la excavación. Eso sí, la maldición fue muy selectiva: a pesar de que fue abierta oficialmente el 29 de noviembre de 1922, Cárter y Camarvon ya habían entrado antes secretamente. La reina de Inglaterra también escapó a la maldición, a pesar de haber visitado la tumba en febrero de 1923. Lo incomprensible es que se salvara el responsable de todo, Howard Cárter.
La explicación. ¿Qué mató a Camarvon? Algunos apuntan a una enfermedad pulmonar llamada histoplasmosis, queestá causada por el hongo Aspergí¡lus níger. El epidemiólogo De Miller, de la Universidad de Hawai, opina que fue una septicemia provocada por un corte mal curado en la cara.
En 2002, Mark R. Nelson, del departamento de Epidemiología y Medicina Preventiva de la Universidad Monash, de Australia, publicó en el British Medical Journal un estudio sobre 44 individuos occidentales que estaban en Egipto en las fechas especificadas, y 25 de ellos se habían enfrentado a los pe//gros de la tumba. La conclusión no pudo ser más llamativa: la media de edad de la muerte de las personas expuestas a la maldición fue de 70 años, frente a los 75 años de los no expuestos. Es decir, todos llegaron a viejos, con o sin visita al faraón.
8. El espiritismo moderno
Los vivos comenzaron a relacionarse con los muertos cuando unas niñas aseguraron que hablaban con ellos mediante golpes.
Sucedió el 31 de marzo de 1848 en Hydesville, un pueblecíto cercano a la ciudad de Rochester al norte del estado de Nueva York.
El fenómeno. En la apartada granja de la familia Fox se escuchaban misteriosos golpes provenientes del cuarto donde dormían el matrimonio y sus dos hijas menores, Katie (11 años) y Maggie (9 años). El sonido respondía a preguntas de las niñas y de la madre. Esa noche ella preguntó: "¿Eres un espíritu?". Se oyeron tres golpes secos y claros, que interpretaron como un sí: acababa de nacer la comunicación con los muertos. El espíritu dijo llamarse Charles Brían Rosma y en vida había sido buhonero y padre de cinco hijos. Al parecer, un vecino malvado le había asesinado y enterrado en la bodega de la casa.
El timo. La noticia se propagó rápidamente. La familia Fox emigró a Rochester, donde vivía la hermana mayor, Leah, de 35 años. El espíritu de Brian se fue con ellos. Desde allí, las hermanas médium Maggie y Katie, sabiamente dirigidas por Leah, comenzaron una gira triunfal por todo el país. Allá por donde pasaban aparecían nuevos médiums.
La explicación. Éste es el origen del espiritismo moderno y marca el comienzo del denodado intento de estudiar científicamente los fenómenos paranormales. Lo absurdo de todo esto es que fue un fraude reconocido. Las niñas sólo querían asustar a su madre, pero la broma desbordó sus planes. Fue su hermana Leah quien, viendo el negocio, las arrastró a continuar con la farsa. Así lo declaró Marga-ret Fox en una entrevista publicada por ,Vew Vor/c Herald en 1888: "Voy a contaros el espiritismo desde su verdadera fundación. Cuando esto comenzó, Katie y yo éramos niñas. Esta anciana que es nuestra hermana se servía de nosotras en las exhibiciones y nuestros ingresos eran para ella". Y terminó diciendo: "El espiritismo es, desde el principio hasta el final, la superchería más grande del siglo".
La noche del 21 de octubre de ese mismo año, en la Academia de Música de Nueva York, ante centenares de testigos y todos los periódicos de la ciudad, Margaret reprodujo los golpes de los espíritus... ¡haciendo crujir su dedo gordo del pie! Los mensajes de las almas no eran otra cosa que chasquidos de huesos. Profundamente ofendidos, los espiritistas orquestaron toda una campaña contra ellas y no se detuvieron hasta conseguir su retractación.