Homenaje al 'Dream Team'
Con 24 remates a puerta, el 'Pep Team' quiso repetir lo de hace 16 años
El holandés Bjorn Kuipers, que debutaba, no tuvo incidencia en el resultado final, pero se equivocó en un par de jugadas, una por bando, en las que perfectamente podría haber señalado penalti. La primera, un agarrón a Iniesta dentro del área en la primera mitad. La segunda, un derribo de Valdés a Milevskiy ya al final del partido. De hecho, en esta última jugada dudó, pero no hubo excesivas protestas
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Ibrahimovic estuvo participativo y genial en muchísimas jugadas de ataque
No permanecerá en la memoria ni pasará a la historia como aquel extraordinario encuentro que un día como el de ayer de hace 16 años Barça y Dinamo de Kiev disputaron sobre el césped del Camp Nou, pero lo de anoche fue un dignísimo homenaje al 'Dream Team', a ese mítico equipo que convirtió aquel partido del 29 de septiembre de 1993 en una referencia ineludible cuando se habla de esa generación.
No será igual porque aquél tuvo un componente añadido de épica del que carecía el de anoche al tratarse de la segunda jornada de la liguilla, pero a fe que esta nueva hornada de cracks que encandila a toda Europa intentó a base de persistir y persistir hasta el final (tal y como le gusta a Pep) que el de anoche también entrara en la leyenda.
Entonces, en 1993, el equipo azulgrana tuvo que remontar un 3-1 en contra de la ida y lo hizo con un 4-1 fraguado en un partido espectacular y con ocasiones de principio a fin. El 2-0 de anoche (por lo visto corto y feo) también llegó en un choque pleno de jugadas de bellísima factura en el que el Barça remató ¡24! veces a portería, 15 de ellas entre los tres palos.
Rondos interminables, triangulaciones de ensueño, pases milimétricos, taconazos mágicos, remates acrobáticos y un sinfín de maravillas que volvieron a demostrar que los jugadores del Barça son hoy por hoy los 'globetrotters' del fútbol, los amos del universo del balompié.
A ello contribuyó el Dinamo, un equipo valiente donde los haya, cuyo técnico ya había anunciado que no se parecería al Málaga. Así fue. Shevchenko, que también celebraba aniversario anoche (33 años), y los suyos entraron en el toma y daca, buscaron el golpe por golpe hasta que no tuvieron más remedio que doblar la rodilla.
Delante, un Barça apabullante y dominante resolvió el choque mientras Guardiola, superviviente de aquel mítico encuentro del 93, rememoraba desde el banquillo viejas batallas