esperemos la cadena presidencial pa estos dias ,hoy mismo podria ser...o en su defecto ,la avalancha mediatica o peor aun las dos cosas al tiempo,,,acordemonos q el señor anda de campaña hace rato,,,cabe destacar q le da la porcina justo cuando se estaba votando el adefesio de ley(sabia q el milagrito era poco probable) ,,como quien no quiere q le vean pa contestar preguntas acerca del asunto,,,,pos el hombre ya se alivio y se dispone a "trabajar".

Foto: Mauricio Moreno / EL TIEMPO
Es tiempo de reír para el ministro del Interior, Fabio Valencia Cossio, quien logró la aprobación de la conciliación del referendo reeleccionista, tras un largo proceso en la Cámara de Representantes.

En entrevista con EL TIEMPO, el Ministro del Interior asegura que "a finales de enero o febrero sería un buen tiempo" para que surta su trámite en las urnas.


El despacho del ministro del Interior, Fabio Valencia Cossio, estaba engalanado con globos multicolores y pancartas hechas a mano por miembros de su equipo de colaboradores que saludaban su triunfo por haber logrado pasar el referendo reeleccionista en el Congreso.

Con evidente dejo de tranquilidad, como quien ha superado un gran obstáculo, Valencia Cossio recibió a los periodistas de EL TIEMPO en su oficina y compartió muchos de los momentos que marcaron el trámite de la ley del referendo.

Según sus cálculos, el referendo reeleccionista para saber si el presidente Álvaro Uribe puede nominarse a un tercer mandato, se haría entre enero y febrero del próximo año.

También dijo que el presidente Uribe solo haría su anuncio de correr por un nuevo período constitucional ("si es que acaso lo determina") cuando el cambio de la Constitución quede en firme, es decir, tan pronto se conozcan los resultados del referendo en las urnas.

En todo caso, el ministro de la política se mostró "tranquilo" y "confiado", porque a su juicio hay "tiempo suficiente" para atender todo lo que demanda este proceso.

¿Qué tan duro resultó pasar el referendo?

Ante todo quiero destacar la decisión de la Cámara el día de ayer. Fue una decisión histórica. Se trata de un hecho que cambia la escena de la política nacional y genera una dinámica muy diferente hacia el futuro. Es evidente que el Congreso ha interpretado un sentimiento mayoritario del gobierno colombiano y un reconocimiento muy claro al trabajo del presidente Uribe .


¿Qué tan débil o tan sólida quedó la coalición luego de esta prueba?

Quedó consolidada. A pesar de todas las adversidades respondió de manera responsable con el país y con la historia.

Durante todo el debate la oposición lo acusó a usted de comprar los votos para pasar el referendo. ¿Qué les responde a esos críticos?

Lamentablemente la política colombiana ha llegado a un bajo calibre. Cuando no se tienen argumentos ni propuestas, cuando no se tiene opinión, se acude a la infamia, a la calumnia y a la injuria para tratar de tapar el sol con las manos. Todas esas sindicaciones malintencionadas que se hicieron fueron puestas en consideración de las autoridades.

El gobierno lo que hizo fue sujetar este trámite a la ley y la Constitución. El Gobierno no tiene preocupación alguna sobre ese tema, no tiene nada que esconder. La oposición se quedó sola, vociferando, sin poder cambiar esa realidad política.

¿Casi logra la Corte Suprema de Justicia desbaratar el quórum para votar el referendo?

Respeto y acato todas las decisiones de la justicia, pero es evidente que toda esa situación generó inquietud y mucho miedo en algunos parlamentarios. En relación con el cambio de jurisprudencia que impide que los congresistas renuncien a su fuero, ahora es más urgente volver a plantear la doble instancia para el juzgamiento de los legisladores. En todo el mundo los ciudadanos tienen doble instancia y jueces de garantías. Lo que hay que hacer es garantizarles a los congresistas esa doble instancia.

Las relaciones entre el Gobierno y la Corte Suprema de Justicia no pueden ser más tensionantes. ¿Después de aprobado el referendo, no es este un tiempo para hablar?

Siempre hemos tenido abiertas las puertas del diálogo, ha habido una relación institucional y fluida. El Presidente de la República siempre ha estado atento a hablar con la Corte Suprema. El Gobierno mantiene esa actitud. Respeta y acata las decisiones de la Justicia, pero se reserva la posibilidad de discutir algunas decisiones que no son compartidas, pero que finalmente son acatadas.
¿Ante la inminente participación del presidente Uribe en el debate electoral, qué tan dispuesto está el Gobierno a pactar con la oposición nuevas garantías políticas?
El Gobierno está listo a tramitar a través de la ley estatutaria que reglamentará la última reforma política algunos aspectos con la oposición. El Gobierno quiere llegar al mayor consenso y al mayor acuerdo, para que en esta democracia se consoliden todas las garantías democráticas. Y para que las elecciones sean totalmente transparentes. El Gobierno está listo a entrar en diálogo con todos los sectores políticos.

¿Ve tiempo suficiente para terminar el trámite del referendo en las instancias que quedan?

La ley sale ahora para sanción presidencial y luego va al examen de constitucionalidad. Hay tiempo suficiente. La Corte, por urgencia nacional o por importancia del tema puede reducir los términos si así lo considera. Obviamente respetamos su independencia y autonomía.

¿Se arriesgaría usted a decir que los tiempos más difíciles del referendo ya pasaron? ¿O serán más difíciles los que quedan?

Todo este proceso es muy importante. La etapa del Congreso fue difícil, tortuosa, compleja, pero finalmente exitosa. Y nos queda el examen de la honorable Corte Constitucional.

¿Qué tanta confianza tiene en superar el examen de la Corte?

La confianza que tengo es que tanto el Gobierno como el Congreso fuimos vigilantes de que todo estuviera de acuerdo con el trámite que regulan la ley y la Constitución.

Y a cuál instancia se aproxima usted con más tranquilidad, ¿a la Corte o a las urnas?
A las dos. Tengo plena confianza en la Corte, y tengo plena confianza en el pueblo.

¿Ninguna de esas dos etapas podrían ser inquietantes a juicio suyo?

Ambas son muy respetables y son muy autónomas. Desde el punto de vista del Gobierno todo se ha hecho debidamente, pero hay que esperar cual es la decisión que tome la Corte.

¿Hasta cuando va a tener el Presidente plazo legal para anunciar que correrá por el tercer mandato?

La decisión de si va o no, es de él. Y habrá que esperar a que la norma quede en firme.

¿Hay que esperar entonces hasta que la gente vote el referendo para saberlo?

Claro, porque si no existe la norma y si no existe la institución, él hoy no podría decirlo. Sería absurdo que él hiciera un anuncio de algo que no puede hacer. Él no puede ser candidato sino hasta que se haya aprobado el refrendo y todavía le faltan dos instancias: la Corte constitucional y la votación popular.

Calculando, cuál es un momento probable para hacer el referendo?
A finales de enero o febrero. Sería un buen tiempo porque está dentro de los términos.

¿Es posible cambiar la ley para hacerlo el mismo día de las elecciones legislativas?

Es algo que han venido planteando algunos sectores, pero nosotros no hemos pensado en eso.

Pero le a?
No, podría ser una posibilidad, pero no hay ninguna decisión

¿Cuál es la agenda legislativa a la que se va a dedicar ahora el Congreso?
Esta legislatura tiene que consagrarse como la legislatura de la Justicia. Ya presentamos tres proyectos a consideración del Congreso que están en curso. El de la descongestión judicial ya surtió la primera aprobación en la Comisión Primera del Senado, va para plenaria y ha sido muy consultado con las altas cortes.
Hay otro: la ley de delitos menores. Se trata de legislar para una serie de delitos que no tienen una gran incidencia social y que de pronto se les podría bajar la categoría de delitos a contravenciones, hecho que nos ayudaría a dos cosas: descongestionar la Justicia y las cárceles.

¿Y creo que va a meter víctimas?

Vamos a estar también con la ley de víctimas, a seguir insistiendo en que a pesar de que está operando perfectamente la reparación por vía administrativa a través de un decreto ejecutivo que se viene cumpliendo, este año vamos a reparar 12 mil familias. En todo el país ya hemos reparado 2 mil, queremos que haya una ley que le dé más categoría jurídica y que mantenga en el tiempo esta política como una política de Estado, porque al fin y al cabo es el primer Gobierno que después de 50 años de violencia en el país está reparando víctimas desde esa época.

Vamos a impulsar la segunda vuelta de la reforma constitucional para la prohibición del consumo y porte de estupefacientes. Esta es una norma que nosotros creemos tiene la mayor trascendencia. Lamentablemente Colombia hoy es un país consumidor, nos lo dice la última encuesta.

Al Gobierno le interesa sacar adelante el Código de Convivencia ciudadana. Esto actualiza el código de Policía, que ni siquiera está acorde con la reforma de 1991.

Estamos impulsando la segunda ley antitrámites para seguir reduciendo trámites y mejorar la competitividad del país. Y vamos a prorrogar el tiempo para la vigencia de la ley de Justicia y Paz.
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