La esposa al marido:
-Ve, José; fíjate que María, la sirvienta nueva que contratamos, no tiene pelos en la vagina.
-¡¡¡Cómo así!!! No me jodás, eso todo pelado, no te creo.
-Qué si, corazón
-No, mija; no te creo; eso tengo que verlo.
-Eh Pues, amor; vos siempre así, si no me crees hagamos algo, mira... yo la llevo a la alcoba, como ahi tenemos el computador pongo la webcam, y como vos a esa hora estás en tu oficina ves todo por tu computador, así si me creerás.
-Bueno, amor.
Al otro día la vieja le dice a la sirvienta:
-Oiga María, ¿Verdad que Ud. no tiene pelos en la vagina?
-No, sumercé, ¿Es que una tiene de eso?
-Claro, María
-Ah, doctora, es que a mi me da pena mostrarle a busté, vea, si me muestra la cuca suya yo le muestro la mía.
La vieja piensa:
-mmmm, ¡Ah! qué carajo, José ya me la ha visto muchos años, le hago.
Y la vieja se sube la falda, se baja la tanga y le muestra. Al rato llama al marido y le dice:
-No, José, qué vergüenza que pasé, pero es que María no me la quería mostrar, me tocó mostrale la mía primero.
Y el marido le responde:
-¿¿¿Vergüenza???... Vergüenza la mía que aquí me traje a 8 amigos...