Durante siete horas, Uribe y sus principales alfiles políticos definieron en la Casa de Nariño la estrategia político-electoral para el 2010: habrá Plan A (referendo) y Plan B (candidatura única).







En todo caso, hubo un principio de acuerdo para que el margen de incertidumbre sobre si Uribe buscará o no un tercer mandato, no vaya más allá de septiembre y octubre de este año.

El plan A consiste en concentrar todas las fuerzas para sacar adelante el referendo reeleccionista que sigue pendiente de la conciliación entre Senado y Cámara, y que permitiría al mandatario aspirar a un tercer período constitucional a partir del 7 de agosto del próximo año.

El plan B no es otro que dar la largada para que los presidenciables uribistas se midan en la arena político-electoral y establecer un mecanismo que podría ser una consulta interpartidista para definir el ganador de esa contienda que represente al uribismo unido en la primera vuelta presidencial.

En la conversación, a la que asistieron, además de Uribe, Andrés Felipe Arias (precandidato conservador); Luis Carlos Restrepo, jefe del partido de 'la U'; Rodrigo Rivera, dirigente liberal; Juan Lozano, aspirante al Congreso; Bernardo Moreno, secretario general de la Presidencia; y el representante a la Cámara Roy Barreras, se habló de los posibles sucesores, con nombres propios.
Y esos nombres fueron: Andrés Felipe Arias, Juan Manuel Santos, Noemí Sanín y Rodrigo Rivera.
¿Consulta interpartidista?
Para definir el candidato uribista que iría a primera vuelta, en desarrollo del Plan B, no está claro cuál sería el mecanismo. En principio sería una consulta interpartidista, aunque también se habló de una encuesta o de las elecciones parlamentarias de marzo.

Uribe fue claro en no incluir en las cuentas para esa consulta interpartidista a Germán Vargas, a quien se refirió de manera insistente como un "contradictor" y un "opositor".
En cambio sí habló de Noemí Sanín, como una de las opciones para tener en cuenta.
Cambios en los planes
Lo primero que examinó la cumbre, que comenzó a las 7:30 de la mañana con un encuentro entre Uribe, Restrepo (el presidente de 'la U') y el representante Barreras, y terminó a las 2:30 de la tarde, fue el Plan B.
Pero Rodrigo Rivera, primero, y luego el ministro Valencia Cossio, pidieron no hablar todavía de Plan B, sino concentrar todas las energías en la salvación del referendo.
Cuando Valencia se incorporó a la reunión, a eso del mediodía, fue cuando tomó cuerpo el Plan A. Valencia fue reiterativo en expresar que el referendo reeleccionista se salvará y que hay que concentrar todas los esfuerzos en esa iniciativa.
El mismo Uribe, quien desde temprano había expresado de manera tranquila su disposición a examinar las fórmulas de relevo, cambió de tono, al escuchar a su ministro de la política.
Entonces se le escuchó decir algo así como que... "el problema es que han puesto al Gobierno frente a un reto no buscado, que es la defensa de los derechos civiles y políticos, pues cuando se enjuicia a un Congreso por votar y defender los derechos de las mayorías se está atentando contra la libertad y contra la democracia".
A partir de entonces la vida del Plan A recobró cuerpo en el encuentro y todos los asistentes se conectaron con esa posibilidad. Inclusive el precandidato Arias dijo que si el referendo reeleccionista pasa la prueba, él pondrá todo su equipo de campaña a disposición de esa causa.
EDULFO PEÑA
EDITOR POLÍTICO


Tomado de El Tiempo