Una amiga mía que se llama mercedes tiene un novio que trabaja en un concesionario y ella se queja de que tiene deformación profesional hasta en los momentos más íntimos. Sin ir más lejos el sábado él entró en su casa diciendo:
- ¡¡Mercedes!! Benz y ponte A4 patas que te voy a echar un Volvo que te voy a hacer un Clío, que en el Saxo no hay quien Mégane.