Un pastuso le comenta a un amigo:
- Me insinuaron que mi mujer me era infiel, así que me puse a vigilarla.
- ¿Y que pasó?
- Pues una noche salió de la casa, la seguí, fue a la casa del vecino, tocó la puerta y el vecino abrió. Mi Mujer entró y cerró la puerta. Me asomé por la ventana y ví que mi mujer se desnudaba y se metía en la cama, y luego el vecino también se quitó la ropa.
- ¡UH! ¿Y después?
- No sé, el vecino cerró las cortinas y me quedé con la duda...