Las pruebas suministradas por Colombia sobre supuestos tratos de las FARC con el gobierno de Ecuador fueron "manipuladas y recopiladas de forma ilegal, lo que las inválida completamente", dijo el jueves una fuente de la Fiscalía ecutoriana que cita un informe pericial.
"Ecuador halló que esas pruebas fueron manipuladas porque el acceso a la información de los supuestos computadores de Raúl Reyes no se hizo bajo los cánones que obliga la informática forense", dijo a la AFP Santiago Acurio, jefe de informática de la Fiscalía.
La Policía colombiana envío a Quito un disco con 45 archivos electrónicos que aseguró haber hallado en el ordenador de Reyes, el número dos de las FARC abatido el 1 de marzo en un bombardeo colombiano en Ecuador, que derivó en la ruptura de los vínculos diplomáticos entre los dos países.
La Fiscalía sometió esa evidencia a un examen pericial y comprobó que la mayoría de los documentos tienen marcas de tiempo posteriores al 1 de marzo, lo que correspondería a la fecha de grabación y no a la de creación, explicó Acurio.
Por su parte, la cadena Ser de España divulgó apartes del informe asegurando "que el ordenador de Reyes fue manipulado por el Ejército colombiano antes de que Ecuador e Interpol se hiciesen con los archivos del disco duro".
"Los archivos que recibió Ecuador fueron grabados en un disco compacto, no corresponden a una imagen forense (copia de todo el disco duro). Por lo que varios tienen como fecha de creación la misma en que fueron grabadas", señaló Acuario.
Así, dicha evidencia, "más allá de si fue adulterado el contenido", no tiene validez porque es una prueba mal practicada y recopilada de manera ilegal, por cuanto Colombia invadió territorio ecuatoriano y actuó sin la autorización de un fiscal", subrayó Acurio.
Bogotá denunció que disponía de archivos de las FARC que mostraban unos supuestos contactos de esa guerrilla con autoridades ecuatorianas para financiar la campaña que llevó al poder al presidente Rafael Correa en noviembre de 2006.
Al mismo tiempo se comprometió a entregar esa información para que Ecuador la investigara. Correa negó los señalamientos y los asoció a una "campaña mediática" para desprestigiar a su gobierno.