Una vez ante la sesión ordinaria de la Asamblea Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), Colombia denunció este jueves la actitud del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, por su disposición a aceptar un diálogo con voceros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc).
El embajador de Colombia ante la OEA, Camilo Ospina, reiteró en su enérgica intervención que el Gobierno Nacional "no avala gestión" del mandatario de ese país con una "organización terrorista como las Farc", dado que "comete crímenes de lesa humanidad, las verdaderas amenazas para Colombia y la región".
Así mismo hizo un pedido para que en caso de que se confirme que el pasado 19 de julio el jefe de Estado de esa nación sí se reunió con los representantes del grupo guerrillero, intervenga la "justicia nicaragüense para que investigue y sancione" dicha conducta.
El embajador de Colombia ante el organismo internacional dijo que por ahora no tiene previsto pedir que se sancione al presidente Ortega por el apoyo que ha ofrecido a las Farc, sin embargo, dijo que apoyar a este grupo subversivo "significa atentar contra la democracia".
La razón por la que no se tiene previsto pedir sanciones -dijo Ospina- es porque los ciudadanos nicaragüenses no pueden asumir la responsabilidad de las declaraciones y decisiones de su gobernante.
"Presidente Ortega ayúdenos a sepultar el cadáver de las Farc, no se sepulte con ellos", concluyó el embajador su intervención.
Nicaragua denunció a Colombia por la violación al derecho internacional
Por su parte, el embajador de Nicaragua ante la OEA, Dennis Moncada respondió que Colombia no ha respetado el tratado de la Haya en cuanto a la soberanía marítima de ese país en el Caribe, como tampoco los tratados internacionales de no injerencia militar en ningún territorio vecino o extranjero, y advirtió que su país velará por la vida de las tres guerrilleras de las Farc que se encuentran en su territorio.
Moncada se refirió a Colombia como un "narco-estado" por ser –según el embajador- una de las naciones productoras de droga que perjudican la seguridad del continente "al ser usado su espacio marítimo y aéreo (el de Nicaragua) para el transporte de droga hacia los Estados Unidos".
También utilizó el bombardeo al campamento del vocero de las Farc, "Raúl Reyes", en territorio ecuatoriano y el uso del emblema de la Cruz Roja Internacional en la operación Jaque como muestras de las violaciones de Colombia a los convenios internacionales.
"Violando la integridad territorial y la soberanía de ese país, se hizo un crimen contra la paz internacional, se violaron las cartas de las Naciones Unidas y el Derecho Internacional", dijo el embajador nicaragüense.