La razón y la inteligencia del hombre no llegan a su auge hasta la edad de veintiocho años; por el contrario, en la mujer la madurez de espíritu llega a la de dieciocho.
Caramba, y los hombres que nos creemos grandes cosas y somos más inmaduros de lo que pensamos.
Mujeres: en nombre de mis compañeros y el mío propio... mil disculpas.