Vale la pena leerlo.....
...opinen..!
La sexualidad no es un tema tabú. La cultura del placer, de la sensualidad, es parte inherente de la personalidad. Pero cuando se la enmarca desde la rigidez, se convierte en trauma.
Cuando se habla de sexualidad muchos son los pensamientos, tabúes y datos erróneos sobre el tema que nos enredan, negándonos la posibilidad de disfrutar de algo tan esencial como el sexo. Definitivamente este momento se creó para distraer la cabeza y por ello no se debe perder el tiempo buscando nuevos conceptos, cuando no se tiene ni idea de lo más elemental.
“Es mucho más sencillo de lo que parece. Sólo hay que tener erotismo, lujuria y, por supuesto, imaginación, para lograr una verdadera satisfacción.
Estas características son tan elementales que no hace falta vestirlas con ropajes innecesarios que confunden o crean ansiedad”, asegura el doctor Carlos Pol, médico siquiatra y master en sexología, asesor de este artículo.
Cuando se inicia la vida sexual es necesario valorar lo que se ha comenzado, resumiéndolo en cuatro palabras: educación, confianza, comunicación y complicidad. Estos elementos le ayudarán no sólo a llevar una sexualidad responsable sino a disfrutarla.
Una alternativa: sexo anal
Aunque muchos la consideran una práctica pecaminosa y pervertida, puede ser muy placentera. Pero hay dos requisitos infaltables: el mutuo gusto y la preparación para realizarla adecuadamente, sin olvidar los roles que deben desempeñar los miembros de la pareja: la mujer, estar dispuesta y el hombre, ser cómplice para lograr una relajación muscular.
La higiene juega un papel muy importante. Es recomendable lavar la zona después del coito, pues existe gran probabilidad de contraer una infección. Por supuesto, no olvide la utilización del preservativo, que le ayudará a evitar no sólo las infecciones sino enfermedades infectocontagiosas.
Quienes piensan que se evita un embarazo cuando se tienen relaciones anales, están equivocados. Aunque existe 1 de 100 probabilidades, es posible que algún espermatozoide viaje a la vagina y se fecunde un óvulo. Obviamente este recorrido no es fácil, pero no es imposible.
Otros hablan de enfermedades originadas por la eyaculación en el recto. Este es un mito. Sólo si se presenta un forcejeo en la penetración se llega a un desgarro anal que puede acabar en hemorroides.
¿Y el sexo oral?
Lujuria para disfrutarlo, confianza para pedirlo, erotismo para gratificarse y señorío para no forzarlo. Esos son los elementos primordiales para realizar esta práctica que, por supuesto, debe ser buscada, consentida y deseada. Aunque existen muchos tipos de técnicas, no hay ninguna mejor que la imaginación y el deseo de complacerse y complacer.
Deje a un lado los tabúes. El doctor Pol explica que, por ejemplo, el hecho de pasarse el semen no trae ninguna complicación. “Inclusive, algunos especialistas en el tema aseguran que ‘se esta ingiriendo vida’, pues éste contiene ácido nucleico, ribonucleico y algunas vitaminas.
El semen ha sido considerado desde la antigüedad como una sustancia embellecedora, pues se dice que mujeres como Popea, Mesalina y Cleopatra usaban mascarilla de semen para lucir una piel fresca.
Sexo dérmico: algo desconocido
Sucede cuando el hombre eyacula en cualquier parte del cuerpo de la mujer, generalmente entre sus senos (posición rusa), quien lo acaricia hasta producir la eyaculación.
Dentro de este tipo de sexo también se incluye la masturbación mutua o los roces piel a piel, que después de producir un alto grado de excitación llevan a un orgasmo. Esta práctica es recomendable en el caso de quienes no pueden tener coito.
tomado de la prensa local.