Lo he intentado de mil maneras, tratando siempre de sacar adelante nuestra relación, pero todos mis esfuerzos, mis ganas se destrozan al ver tu comportamiento, siempre el mismo.
Haz acabado con todas mis ilusiones, los sueños de ayer son tortura hoy para mi vida, sólo me resta volver a comenzar, pero en fin.

Antes de despedirme, quiero entregarte mis últimas frases sin carga alguna de odio o rencor. Por eso trataré de ser corto en mis expresiones.

Lo vivido contigo será ya un pasado imborrable, no me arrepiento, por el contrario fue una experiencia donde los dos ganamos y perdimos en su momento. Me retiro de tu lado con el dolor profundo que siente mi corazón.

Siempre te extrañaré, y no dudes que mi cuerpo será siempre tuyo para aquel día que decidas cambiar o mejor ser una persona distinta en tus actos.