Dame a beber el cáliz que emana de tus mágicos labios…
Y probar la ambrosia de tus senos perfectos…
Déjame rozar tu cuerpo…
Gozar de nuestra humanidad….
Ser cómplice de tus vanidades
Para que un delirio nocturno… invada nuestra senda.
Perdámonos en nuestra locura,
Caminemos por la senda de la quimera…
Y cumplamos nuestra sexual condena,
Que a nuestras almas integra
A la lujuriosa orbita de tu sensual figura…
Y al paraíso de tu pérfida intimidad…
Que tiembla al son de mis caricias...
Y enerva mis deseos...clausura mi soledad.