Estaba un tipo confesandose en la Iglesia y le dice a padre:
-Padre, es que yo soy gay.
El padre contesta:
-Hijo, eso es pecado, va en contra de los designios de Dios, ¿cómo has podido?
Pero el tipo contesta:
-Pero eso no es todo, es que mi papá y mi hermano también son gays.
El padre, ya algo preocupado, pregunta:
-Carajo, ¿es que en tu casa no hay nadie a quien le gusten las mujeres?
-Si, a mi hermana. |