Historia 100 % real. Hace años que estaba de moda los chat, y aparecían chat de varias ciudades, comencé a conversar con una mujer y pasamos al MSN de Hotmail , me preguntó de qué ciudad yo era, y le dije de donde soy . Ella me dijo que era de Armenia y yo le creí hasta ese entonces, ella me insistió que colocara la cámara web para conocerme, y yo se la coloqué. Su misterio me atraía, todavía tenía dudas si era una mujer o se hacía pasar por mujer. Me dijo que era casada y que tenía dos hijas, y que su marido pasaba trabajando turnos de noche. Yo le insistía que colocara su cámara web, pero me decía que no tenía. Ya hablábamos todos los días, y sobre todo en altas horas de la noche y madrugada. En esos tiempos yo chateaba mucho con diferentes mujeres, y había una que era “novia” de chat, ella vivía lejos, vivía en otra ciudad y nunca nos pudimos ver en persona. La mujer que decía que era de Armenia siempre me preguntaba por mi relación con la que vivía lejos, hasta que un día le dije que ya no tenía nada con ella, que ella estaba lejos.
Aquí es donde se desata el desenlace de la historia, después de tener más o menos dos semanas hablando, ella me dice que en realidad vive en la misma ciudad que yo. Y mi testosterona se dispara al saber que está cerca de mí. Y es el momento en que más insisto en que me envíe una foto por los menos para conocerla, y ¡sorpresa! Me envía la foto. Pero no me muestra su rostro, envía una foto recortada, y es una morena gruesa, y de grandes tetas, unas piernonas divinas. Yo ya me imaginaba cosas que le quería hacer a esa mujer, y seguía la duda. Pero algo me decía que si era una mujer por su forma de hablar, hasta el día que me envía el video de la cámara web y confirmo que es una mujer, ya la forma de tratarnos de los dos cambió desde ese momento, yo ya tenía claro que la quería llevar a la cama. Y algo me decía que también ella lo quería, todo ese tiempo ella me tenía estudiado, ella era mayor que yo en edad y ahora con el pasar del tiempo creo que solo esperaba el momento para decirme que era de mi misma ciudad.
Ya en los siguientes días la conversación era caliente, ella sacaba sus tetotas y ella se las chupaba, y yo empalmado con ganas de meterme por la pantalla del computador, con ganas de tenerla ya. Me pedía que me masturbara, que le diera toda la leche. Y así lo hacía, era un placer para mí darle la leche que tanto me pedía, y ella también se masturbaba. Pero ya yo no quería más videos a través de una pantalla. Me decidí proponerle que nos viéramos, que nos quitáramos estas ganas que nos teníamos, y así fue, un sábado en la noche nos vimos, y cuando ella llegó me vio y vi que se iba, me tocó caminar rápido y alcanzarla, yo quedé en shock por su actitud, y le pregunté el por qué de irse, que todavía no habíamos entrado al motel. Ella me dice que en cámara me veía de más años, a mí se me bajó todo, no quería perder la oportunidad y me tocó insistirle cerca de 10 minutos para poder ingresar con ella al motel.
Esta historia continuara…

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