Iniciado por italianrex

En la actualidad solo somos músicos tocando en el Titanic mientras se hunde, el barrio sufre de una triste decadencia, alguna vez pensé que el final del barrio simplemente sería que los negocios y las chicas se irían a un sitio diferente pero resultó en un cuadro tragicómico lleno de explotación, de extranjeros hampones y de negocios cada vez más bizarros y desesperados.

El final del barrio parece el final de Macondo en cien años de soledad, población que en sus épocas más espectaculares ostentó burdeles babilonicos llenos de papagayos, con putas espléndidas, ataviadas con las mejores prendas y provistas de toda clase de recursos para estimular hasta a los más desvalidos.. al final de sus días sus burdeles se habían convertido en escampaderos de tejas de zinc decorados con flores de papel, con putas tristes que se acostaban por un mendrugo de pan y que marcaban las cuentas de sus clientes haciendo rayas con la uña en las paredes...y eso es el santafe ahora, se dio una combinación de factores desafortunados: pérdida del valor adquisitivo, competencia de otras regiones por las putas, migración desbordada de una población extremadamente empobrecida promotora de toda clase de ejercicios ilegales, administradores nefastos, pandemia, demoliciones....en fin,
el final es triste y lento, se acabaron las épocas en las que no sabias si entrar en la piscina , en Paisas o en fiebre, si tenías poco dinero te marchabas para Troya y si tenías buen presupuesto entrabas al castillo, pero sin importar a donde fueras , entraras en el sitio que entraras, aún en la misma calle, sabias que ibas a tener una erección más dura que el acero, me recuerdo completamente excitado en las escaleras de Paisas, viendo bajar a cada chica más buena que la anterior, o un viernes en la noche en fiebre, lleno a reventar, con putas que te restregaba sus culos respingados acompañados de miradas lascivas sin importar que tuvieras pinta de Man con plata o de pato, o incluso en Troya, donde tú mayor dilema era si te comias a Andrea o a Farina o si le dabas una oportunidad a Yuriko, o si le dabas verga a Saray por tercera vez en la semana, y ni que decir de el castillo, lo más parecido a una casa de Burlesque en el santa.
Tiempos que no volverán porque la dinámica del negocio cambió, aún quedan algunas veteranas de mil batallas como campanita o la hinchada que hacen que me resista a dejar de ir al barrio.