No es Uribe, es simplemente una cuota del Partido de la U en las alianzas que Petro hizo con la política tradicional y que hizo una compra que huele a corrupción. Lo que me llama la atención (y en esto nada tiene que ver Uribe) es que este tipo es muy cercano, son amigos y me imagino que allí aprendió que la corrupción es un estilo de vida y de ahí que malgastar los dineros públicos (no me extrañaría que hubiera una comisión de por medio) esté metido en su ADN. En otras palabras: "El que anda en la miel algo se le pega", dice el dicho popular.

Ahora, el que Petro sólo se limite a regañarlo y no lo haya declarado insubsistente o al menos le haya pedido la renuncia quiere decir que este tipo está muy apalancado por el Partido de la U, lo que es todavía más grave porque significa que el gobernante del cambio está secuestrado por los políticos tradicionales y en muchos aspectos de su gobierno veremos (o padeceremos) más de lo mismo.