Como en los países desarrollados, se busca que las empresas tributen de acuerdo con sus ingresos, eso es todo. Además, que tengan claro que pueden invertir de manera segura con leyes claras y estables. Es lo que se llama seguridad jurídica. Ese es el ideario liberal de la libre empresa.

El neoliberalismo, en cambio, que ha sido nefasto, busca favorecerlas al máximo con exenciones en el entendido de que si ganan más darán mayor empleo. En la práctica no ha sido así. Simplemente se enriquecieron en forma desmedida mientras se empobrecía el resto de la población.

Quitar estas exenciones es regresar al programa liberal original y emplear estos recursos en beneficio de las clases menos favorecidas.