Iniciado por Hidde

Que onda compañeros

Hace unos días me di una vuelta por el santa y me dobletie. primer round con una callejera, nada rescatable, pero tampoco como para denunciar, desde que volvimos después de pandemia, siento que el estándar del servicio con callejeras del santa fé decayó mucho, lo normal es que se dejen manosear un poco al inicio, mamada, clavada y adiós, pero polvos memorables ya muy difícil conseguir con esas viejas ni siquiera pagándoles doble turno, ante eso he venido pensando que es mejor poner 20k COPS más en los sitios y comerse algo con gusto, o si la economía no da ir a chapinero o buscar en páginas de prepagos, pero bueno esa es mi perspectiva si a alguien más le ha ido bien con callejeras, lo felicito y espero con ansia recomendaciones de BUENOS POLVOS, no viejas medianamente lindas que se lo dejan meter y ya.

Pero bueno obviamente no estoy invirtiendo mi tiempo escribiendo un post solo para quejarme, quería comentarles de una grata experiencia que tuve con una cosita deliciosa en Fiebre, la subversiva se hace llamar Cristal y es una mujer de unos 23 años blanquita, 1.65 aproximadamente y cabello color castaño, ese día la agarré con un topsito y falda rosada, llevaba un buen rato dando vueltas por los lupanares escogiendo a mi presa meticulosamente, no quería desperdiciar ese segundo tiro con una suripanta cualquiera y me di mi tiempo de recorrer esa estepa puteril entre Troya, Paisas y Fiebre seleccionando al mejor espécimen para cargar sobre mi regazo y ponerla a aullar en alguna de esas habitaciones que han sido testigos de muchas de mis mejores faenas (si los chuzos tuviesen cámaras por ahí escondidas, cuantas buenas escenas ya les habré dejado).

Estaba analizando el panorama con algunas buenas candidatas en mente, cuando veo llegar a un par de mujeres recién a iniciar su turno y una de ellas no con pinta o semblante de puta, tenía la típica apariencia de pelada sana de rostro lindo, de esas con las que intercambias una mirada y una sonrisa en un lugar anónimo que no da más oportunidad que conformarse con ello, en cuanto la vi subir por las escaleras sabía que mi búsqueda había terminado, fue solo esperar a que bajara y me le acerqué de una (en este mundo muchas veces el que piensa pierde), le dije sin tapujos que me la quería comer toda y sin restricciones, que quería hacer mía su boca y cada parte de su cuerpo que quisiera lamer, probar saborear, le pregunté si tenía algún problema con eso y me dijo que para nada, formalizamos el acuerdo entre amantes fugaces al frente de la barra, sus 80K y para arriba, entramos a la pieza y después de dejarle la respectiva propina a la aseadora, con una mirada cómplice de mi parte pidiéndole con mi expresión que nos dejara gozar el mayor tiempo posible, cerramos la puerta y cuando me disponía a desvestirla como abriendo el delicado empaque de un regalo nuevo, fue ella quiten tomó la iniciativa y me busco la boca, nos besamos, nos desvestimos, la recorro toda de arriba a abajo con mis manos y mi boca hasta su vagina. Quiero hacer una pausa en mi relato para comentarles algo un poco extraño de mi, me gusta fijarme en el sabor de las vaginas, no todas saben igual por más limpias que estén y algunas chicas tienen un sabor particular, un poco almizclado pero con una delicadeza implícita en ese sabor, como me encanta probar vaginas así, deberían sacar un alpinito con ese sabor. Esta mujer, Cristal tiene ese sabor particular y en cuanto lo siento en la punta de mi lengua y en el paladar me le como esa vagina como si fuera el último manjar que tuviera permitido comerme en la vida, después de un buen rato sosteniéndole las piernas levantadas para pasar de su vagina a su ano y viceversa, ella me detiene, se arrodilla, me pone el condón con la boca y me da una de esas mamadas, suaves, lentas y jugueteando con su lengua debajo del glande, muy muy rico y se me pasó por la mente, cuan deliciosas deben ser sus mamadas al natural, una pena que casi nunca repito puta. Luego de un rato de mamadas y de tenerme listo tomarla, le digo que por el tiempo no se preocupe que lo importante es que la pasemos bien, después de esas palabras nos dedicamos a poseernos el uno al otro, turnándonos el quien se culeaba a quien, hasta que después de muchas posiciones y de estar los 2 sudando y gimiendo, me vine teniéndola en 4, mirando su rostro trastornado después de mis últimas arremetidas y gimiendo.

Se dio tiempo para asearse mientras hablamos un poco más, nos despedimos con un beso y un abrazo y seguimos nuestros caminos, una mujer hermosa con la que estaría feliz de culear muchas más veces, de no ser por mi manía de querer comerme tantas viejas como sea posible, una pena realmente pero es el mayor deseo de mi alter ego putero en este último tiempo.

Disclaimer: Que me haya ido bien a mi, no asegura que le vaya así a los demás, en esto del sexo influye mucho la química aun cuando el sexo es pago, si se quieren arriesgar con ella háganlo bajo su propio riesgo.