Iniciado por Polimorfo 
Alejandra...Jovencita Amable
En caso de ser la misma nena, habia sido referenciada solo un par de veces y con buenos comentarios :
cuando esta nena trabajaba en Palmeras Real(casa verde) , me manifestó que uno de los que hacia roles de jalador - portero - barra, estaba medio enomarado y andaba detras de ella.
La verdad, cuando ingresaba y la preguntaba, era notorio su entusiasmo . " Si, si está bacan, ya se la llamo"
Decia que no le prestaba atención porque el tipo "era casi un niño". En realidad, si era un muchacho, pero Alejandra también es bastante Joven y que este diciendo eso de alguien con poca diferencia de años, da a entender que tiene una auto imagen de mujer ya hecha.
Si en verdad profesa tendencias homo, a este jalador-admirador le puede aplicar perfectamente el comentario :
Sea cuales sean sus preferencias de género, parece no afectar su actitud al atender :
Querendona, amable, relajada.
Caritas de placer, gemidos suavecitos, arqueo agudo de la espalda y besos bien, pero bien profundos, con lenguas que discuten tenazmente para ver quien interioriza más en la boca del contrario.
Al tenerla en cuatro, es una delicia ver la inmensidad de sus caderas y sus muslos poderosos y firmes, que soportarían hasta la arremetida más colérica de cualquier amante belicoso.
En en negocio de la Casa verde(palmeras real) usaba con frecuencia un vestido de baño negro, que la hacia ver realmente amazónica.
Posteriormente, no la volví a encontrar. Informaban, que se había quedado en Venezuela, sin saber la certeza de su regreso. Por lo que veo, volvió, y está de nuevo en este ambiente. Al parecer, sigue con gran disposición.
Lastimosamente, desde mi última experiencia a finales de febrero con la voluptuosa Mia (Que habrá sucedido con ella ?), de la bonita, no he podido concretar mi retorno a Bogotá y por ahora, solo queda evocar vivencias pasadas, pero no por ello se pierde el interés en el foro, ni en las ganas de continuar con experiencias sexuales intimando con Prostitutas en la Capital.
Alejandra me deja la sensación de ser ese tipo de chicas por las cuales vale la pena seguir frecuentando chapinero, ya que su atractivo sumado a su cordialidad y entrega, supera por mucho, el valor de lo invertido en las tarifas promedio del sector.
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