Ver Mensaje Individual
Antiguo 23-11-2020 , 18:00:29   #4
todotuyo
Recien Registrado
 
Avatar de todotuyo
Me Gusta
Estadisticas
Mensajes: 12
Me Gusta Recibidos: 65
Me Gustas Dados: 54
Ingreso: 02 mar 2010

Temas Nominados a TDM
Temas Nominados Temas Nominados 0
Nominated Temas Ganadores: 0
Reputacion Poder de Credibilidad: 0
Puntos: 134
todotuyo el Usuariox se nos esta haciendo populartodotuyo el Usuariox se nos esta haciendo popular
  
Predeterminado Respuesta: Que pequeño es el mundo mama

parte4
- ¿Qué pasa? me has pillado viendo el final del partido y mamá salió a comer con una amiga y todavía no ha vuelto.
- Por eso te llamo…. –Dije quedándome mudo y con los ojos abiertos como platos, asistiendo al lento estriptis que estaba haciendo mi madre, la cual, tras desabrocharte el cinturón de la falda y bajar unos centímetros de la cremallera de la misma, la dejó caer al suelo-
- ¿Si? Hijo mío ¿Estás ahí? No te escucho.
- Si papá, es que se me ha quedado sin cobertura el “******o”. –Mi madre sonrió al escuchar ******o, imaginando que iba con segundas-
- ¿Qué querías?
- Veras… es que casualmente he visto a mamá y ha venido a visitarme a mi casa, no te preocupes si tarda, dice que te hagas la cena que ella se va a comer unas salchichas que tengo yo. –Mi madre comenzó a desabrocharse la camisa, dejando poco a poco sus pechos a la vista, y demostrando que mi jefe tenia buen gusto eligiendo ropa interior, ya que el sujetador era tan excitante como las braguitas.
- ¿Salchichas? Pero… si nunca le han gustado las salchichas
- Estas creo que sí, papá. Por lo menos voy a intentar que se coma una.
Mi madre, ya en ropa interior frente a mí, alucinaba con el atrevimiento de mis frases con doble sentido, haciéndome gestos de que tuviera cuidado, pero yo sabía perfectamente que mi padre jamás podría imaginar que su esposa estaba exhibiéndose en ropa interior ante mí, y que mi salchicha llevaba tiempo erecta.
No se había enterado de que mi jefe y otro desconocido se la habían follado, o que la ropa interior que llevaba puesta había sido un regalo de Lorenzo, como para sospechar de su propio hijo.
- Ostras, ¡penalti!, penalti! ¡En el último minuto! ¡Me cago en todo lo que se menea!
- Te dejo papá.
- Dale un beso a mamá de mi parte.
- No te preocupes que si le voy a dar el beso.
Sentado en el sofá, hice un gesto a mi madre para que diera varias vueltas y poder extasiarme con su cuerpo.
- Ufff, mamá. Estas buenísima y esa lencería te hace un cuerpo muy excitante. ¿Los pantis también te los ha regalado mi jefe?
- Si. Le encanta la lencería… no sé por qué… luego me la quita rápido. –Mi madre se percató de lo inconveniente e indecorosa de aquella última afirmación, tapándose la boca con la mano-
- No me extraña que te la quite tan rápido, es que se la pones dura a cualquiera. Estas para comerte. –Dije sin reparos-
- Si estas hoy zalamero, sí. –Mi madre continuaba en ropa interior, sin hacer mención de volver a vestirse, a pesar de darse cuenta perfectamente de mis miradas lascivas-
- Una cosa… además de Lorenzo… ¿te has citado con otros hombres?
- Bueno…. solo otro… ¡si estas preguntón, si!
- ¿Otro?, ¿Quién?
- No sé cómo se llama, solo sé que es empresario, que está casado y que tiene muchos hijos.
- ¿Qué edad tiene?
- Sesenta y cinco años, es algo mayor para mí, pero se conserva muy bien.
- ¿Sesenta y cinco años?, tomará Viagra.
- Ja, ja, ja. Dice que conmigo no le hace falta. –Noté que mi madre empezaba también a perder reparos en comentar o describir sus “citas”-
- ¿Ese también te regala lencería?
- No. Pero se ha empeñado en llevarme a París a un congreso como si fuera su secretaria, obviamente para dormir en habitaciones anexas y meterse en la mía por la noche.
- Ya imagino ya. Para que seas su secretaria para todo. ¿Y no has aceptado?, siempre has dicho que te gustaría viajar, y....si aparte de viajar te dan una alegría para el cuerpo…
- ¡Qué va! Son cuatro días. ¿Qué excusa le pongo a tu padre?
- A partir de ahora yo seré tu excusa. Dile que vienes a visitarme y siempre que llame por teléfono le diré que estas durmiendo en mi casa y que en esos momentos no te puedes poner al teléfono.
- Sí, es mejor decir que no me puedo poner al teléfono, que la última vez tuve un percance por culpa del movil.
- ¿Un percance?
- Si, tenía el teléfono móvil encima de la mesita de noche mientras Lorenzo me… bueno… eso…
- ¿Mientras te follaba?
- Ufff ¡que burro que eres!, pero sí, eso.
- ¿Y?
- Sonó el móvil y vi en la pantalla que era tu padre…
- Otras.
- Lo toqué con la intención de apagarlo y me confundí.
- Otras, ¿no me digas que le diste a descolgar?
- Si. Y para colmo… en fin… Lorenzo… estaba a punto de… eso… de correrse, y embestía con tanta fuerza que el cabecero de la cama golpeaba en la pared haciendo blom, blom, blom, blom, y gemía de tal forma que parecía se iba a morir en cualquier momento.
- ¡Ostias!
- Me tenía tan agarrada que me las vi y deseé para poder colgar el teléfono. No puedes ni imaginar la película que tuve que contarle después a tu padre diciéndole que lo que había escuchado era un perro y un tambor.
- Ja, ja, ja, ja. Me lo imagino y me pongo cachondo. Lorenzo follándote y mi padre creyendo que pasabas al lado de un perro y un gilipollas con un tambor. Acojonante. Se me está poniendo dura. –En realidad la tenía dura mucho antes-
- ¿Dura?, no digas eso que me visto ahora mismo, que no haces más que mirarme y parece que no has visto una mujer desnuda en tu vida. –Lo dijo, pero no hizo nada por vestirse-
- No seas tonta mamá. Con lo a gusto que estamos. Lo que voy a hacer es quitarme yo también la ropa para quedar en igualdad de condiciones y no te sientas desnuda.
- Ja, ja, ja. ¡Hay que ver qué cosas se te ocurren!
Me quité la camisa y posteriormente el pantalón. Mi madre me observaba expectante, y se le escapó una expresión de sorpresa –ohhh- al comprobar que mi erección era más que evidente.
- ¡Pero bueno! ¿en quién estás pensando?
- Ja, ja, ja. No te preocupes mamá. Eso sí… si llama papá por teléfono ten cuidado con no abrir una “video llamada”, ja, ja, ja.
Sin dejar de sonreír me acerqué a mi madre, sin que ésta pareciera asustarse de mi miembro erecto aproximándose a su cuerpo.
- ¿Sabes una cosa, mamá? Me dijo Lorenzo que tienes las tetas muy duras, -no recordaba si efectivamente me había dicho tal cosa, pero era igual- me gustaría comprobar si es verdad. Así con ese sujetador tan sexi parece que sí, pero palpando se comprueba mejor.

todotuyo no está en línea   Responder Citando
 
Page generated in 0,07524 seconds with 11 queries