Respuesta: Modelos del Santa Fe |
Renunció a las páginas.
Srs en días pasados conté algunas reseñas de mi experiencia con fufas de páginas y les contaba que el resultado era más bien regular.
Hoy vuelvo para decir que definitivamente no voy más con eso. Durante largo tiempo he leído experiencias donde el engaño es la norma con este tipo de servicios, fotos falsas, fotos viejas o fotos super retocadas son la norma.
En este tipo de anuncios la mentira descarada es lo que más abunda. Uno no cree que una mujer que se cree parecida a alguna actriz o modelo, publiqué fotos de está pensando que un cliente de veras se va a creer que es la misma persona.
Mi última experiencia fue fatal, me entusiasme con una venezolana cuyas fotos se veían reales, ambiente de casa popular, calidad poco profesional, no aparentaba retoques y sobresalía unas hermosas y grandes tetas. En fin un perfil muy creíble.
Me tomo el tiempo de ir prácticamente a la periferia de la ciudad a Bosa, a un sector inundado de venezolanos lo cual ya es un riesgo mayor. Me abren la puerta y directo me llevan a una habitación, sin siquiera un saludo y presentación básico.
En par segundos tengo frente a mi una gorda desagradable, fea de cara y cuya única semejanza con las fotos eran sus tetas. Ahí está frente a mi empelota y cobrandome para empezar.
Yo bloqueado mentalmente trató de digerir la situación y tomar una decisión acertada. Me hago la ilusión que las tetas pueden salvar la situación, hago cuentas de el viaje tan largo y también el inconsciente me alerta del peligro de estar allí.
Entonces hago que miro mi teléfono y actuó como si tuviera que hacer una llamada urgente. Uso como pretexto que no puedo hablar con la música que tenían allá que para rematar era horrible, ofrecen apagarla y yo le digo que mejor en la calle porque es mi mujer.
Con cara de que no me cree, me dice ve y llama y aquí te espero, pero me pide que le pague. Yo digo es sólo un momento ya vuelvo a entrar. Salgo y empiezo a actuar como si hablará y me voy caminando de ahí con mucho miedo.
Afortunadamente pude salir de ahí pero maldiciendo por semejante engaño. Perdí $40000 en taxis y aparte el susto de meterme con esta gente sin escrupulos.
Como extraño el Santa fe. Me podía pasar horas buscando sin problema a aquella mujer que me pudiera complacer.
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