Denuncian que cónsul en Orlando certificó su conocimiento de inglés en una notaría El representante David Racero cuestionó también a Claudia Bustamante por su experiencia laboral en diplomacia.
Sumado al escándalo alrededor de la ‘bodeguita’ uribista, en septiembre se conoció que la excandidata al Senado por el Centro Democrático no concluyó sus estudios profesionales en derecho.Tomada de Facebook.com/cmbustamante.bustamante
Un nuevo cuestionamiento enfrenta la hoy
cónsul de Colombia en Estados Unidos,
Claudia Bustamante Ceballos. Según denunció el representante
David Racero, de la coalición Decentes, sumado a
dudas sobre su experiencia en diplomacia, la funcionaria certificó el conocimiento del idioma
inglés a través de una notaría y no mediante un instituto debidamente acreditado.
Por un lado, el representante manifestó que Bustamante –que hace un mes resultó salpicada como una de las
promotoras de una ‘bodeguita’ uribista para atacar a medios, periodistas y adversarios de manera organizada– no cuenta con la debida experiencia para el desarrollo de su cargo, por lo que divulgó una
certificación laboral emitida por una organización privada que no tiene relación con diplomacia.
Se trata de la firma Marrocar S.A.S –responsable de la popular
‘feria del brasier y solo kukos’–, donde la cónsul laboró entre 2003 y 2010 como directora de mercadeo. “En el gobierno técnico de Iván Duque
esta es la experiencia en diplomacia de quienes han sido designados en el servicio exterior”, criticó Racero.
Por otro lado, el congresista divulgó una
certificación emitida por una notaría del municipio de El Retiro (Antioquia), a la que Ceballos acudió en abril de 2019 para afirmar que desde hace más de 20 años
‘lee, habla y escribe’ el idioma inglés en grado B2, que permite hablar con fluidez y producir textos. En el documento, la cónsul hace constar que estudió el idioma en un instituto en Medellín “que ya no existe”.
Ante ello, el representante cuestionó que el conocimiento del idioma
no se certificara con exámenes de suficiencia, sino con una declaración en notaría. “Lo peor,
ella misma se autocertifica el nivel B2 (que solo se puede certificar mediante la presentación de un examen)”, agregó Racero.
Sumado al escándalo alrededor de la ‘bodeguita’ uribista, Ceballos ha sido
cuestionada por su formación profesional. En septiembre pasado, la emisora Caracol Radio reveló que, aunque la excandidata al Senado por el Centro Democrático registró 10 semestres terminados de derecho en 1999,
no se graduó de la carrera profesional.
Fuente: El Espectador Tratando de conversar en estos días con un burro, me decía que un sello de la notaría es palabra sagrada. Jajajajaa Me imagino que como "Aboburro", él certifica también su experiencia vendiendo calzones en la Feria del brasier y solo kukos.