El gigante del comercio electrónico Amazon anunció este jueves que canceló sus planes para abrir una nueva sede en el distrito de Long Island City, en la ciudad de Nueva York.

En un texto publicado en su blog corporativo, la firma señaló que el plan “requiere relaciones positivas y colaborativas” con los políticos locales y estatales “a largo plazo”, y “varios” de ellos “han dejado claro que se oponen” a su presencia en la ciudad.

“Decepcionada” por la decisión, Amazon señaló que “el 70% de los neoyorquinos”, según encuestas, apoyaban su inversión en la ciudad pero no así sus políticos, que han evidenciado que “no trabajarán” en las relaciones necesarias para “llevar a cabo el proyecto”.

En el texto, la empresa expresa agradecimiento al gobernador del estado, Andrew Cuomo, y al alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, por su “trabajo incansable” para impulsar la inversión y la creación de empleo, y espera tener “oportunidades futuras para colaborar”.

El compromiso y dedicación de los dirigentes es una de las razones por las que la cancelación del plan ha sido “tan difícil”, asegura Amazon, que no pretende reanudar la búsqueda de una nueva sede para reemplazar la pérdida de Long Island City.

“Seguiremos con lo planeado en el norte de Virginia y Nashville, y continuaremos contratando y creciendo en nuestras 17 oficinas corporativas y centros tecnológicos en Estados Unidos y Canadá”, detalla la nota.

El pasado noviembre, Amazon anunció su intención de emplazar dos nuevas sedes en los estados de Virginia y Nueva York, una inversión conjunta de 5.000 millones de dólares que emplearía a unas 50.000 personas en total.

Pero en Nueva York, organizaciones civiles y políticos demócratas criticaron desde entonces los incentivos fiscales ofrecidos por el estado a Amazon, al considerar que su establecimiento afectaría a los servicios públicos del área, como el transporte, y encarecería la vivienda.

La oposición fue palpable en una serie de audiencias sobre el proyecto en el Ayuntamiento, donde los concejales fiscalizaron este acuerdo por el que la ciudad y el estado de Nueva York habían ofrecido unos 3.000 millones de dólares en beneficios fiscales para Amazon.

The Washington Post, diario propiedad de Jeff Bezos, fundador y máximo ejecutivo Amazon, publicó la semana pasada que la firma de comercio electrónico estaba reconsiderando sus planes de abrir la sede ante la oposición de funcionarios clave, entre ellos la congresista demócrata Alexandria Ocasio-Cortez.

El gobernador Cuomo, que ha insistido en que a cambio de los 3.000 millones en incentivos fiscales Amazon generaría unos 27.000 millones en ingresos, advirtió la semana pasada que si el proyecto se cancelaba, los dirigentes políticos tendrían que responder a los votantes por qué no llegarían 25.000 nuevos empleos al estado.